UNICEF España lanza la iniciativa ‘Cambiemos la letra’ contra el trabajo infantil
UNICEF España ha lanzado hoy la iniciativa Cambiemos la letra, que tiene como objetivo concienciar sobre el trabajo infantil, que afecta a 215 millones de niños en todo el mundo, y conseguir fondos para apoyar el trabajo de UNICEF para defender los derechos de la infancia más vulnerable en todo el mundo.
Entrando en la web www.cambiemoslaletra.comcualquier persona puede cambiar la letra de una conocida canción infantil en la que se habla de niños que no podían jugar por tener que hacer distintas tareas domésticas, en vez de vivir como lo que son, niños.
Según Naciones Unidas, cerca de 1 de cada 6 niños y
niñas de entre 5 y 14 años sufren trabajo infantil.Comparativamente, el trabajo infantil afecta a más niños que niñas.
Sin embargo los trabajos que realizan las niñas están más ocultos:
el trabajo doméstico y algunas de las peores formas de trabajo
infantil, como la prostitución y la pornografía. Se estima que el
90% de los menores que trabajan en el servicio doméstico son
niñas.
El trabajo infantil supone una grave vulneración de los
derechos más básicos de la infancia: daña el desarrollo
físico, mental, emocional o moral de niños y niñas; les
priva de la posibilidad de ir a la escuela; son separados de sus
familias, expuestos a graves peligros y enfermedades y/o
abandonados a su suerte en la calle de grandes ciudades.
El trabajo infantil roba a los niños su
infancia y sus posibilidades de desarrollo porque los
niños trabajadores, privados de educación y salud, tienen escasas
perspectivas de futuro en su vida adulta. Además reciben los
salarios más bajos y reciben las peores condiciones laborales, lo
que puede causarles lesiones físicas permanentes y problemas de
salud crónicos.
Acción de UNICEF contra el trabajo infantil
Para lograr erradicar el trabajo infantil UNICEF incide en
varios ámbitos. Por un lado negociando con gobiernos y
administraciones públicas para fomentar leyes contra el
trabajo infantil, y por otro apoyando a las comunidades y
a las empresas para que rechacen cualquier forma de explotación
infantil. []
Una parte ineludible de la lucha contra el trabajo infantil
recae en los gobiernos afectados, que deben impulsar políticas
económicas y sociales que protejan a los sectores más vulnerables
de la población frente a la explotación laboral y la desprotección
en caso de pérdida del empleo.
Por ejemplo, de acuerdo con un informe recientemente publicado
por la Organización Internacional del Trabajo, una cobertura
de seguridad social universal, al menos a un nivel mínimo adecuado,
es clave en la protección de niños y niñas frente al trabajo
infantil.
Esta responsabilidad de los gobiernos no excluye ni exime al
sector productivo de su responsabilidad en el respeto a los
derechos de sus trabajadores. Unas mejores condiciones
laborales globales redundan en un mejor sostenimiento de las
familias, evitando el trabajo infantil. Por otra parte, es
necesario un control riguroso de la cadena de producción, ya que en
muchos casos, niños y niñas trabajan a través de
subcontratas.
El papel del consumidor
Como consumidores tenemos un papel importante en la
erradicación del trabajo infantil: la compra responsable, la
reflexión sobre los efectos de nuestros patrones de consumo en la
cadena productiva y el rechazo a comprar productos que
sospechamos que pueden haber sido producidos en condiciones de
explotación son claves para realizar una presión efectiva
contra el trabajo infantil.
Tanto los vídeos como el microsite de esta iniciativa han sido
conceptualizados y realizados de manera desinteresada
por Revolution Publicidad.