¿Cómo ha impactado el COVID-19 en la educación inicial?

Las escuelas infantiles se han tenido que reinventarse para seguir ofreciendo a las familias apoyo, en un ciclo que es clave en el desarrollo de los niños y las niñas, y que supone una herramienta fundamental en la reducción de la desigualdad.

20/07/2020

Incertidumbre, desesperación, miedo o angustia son algunas de las emociones que ha experimentado el personal de las escuelas infantiles que ostentan la acreditación como centro referente en educación en derechos de la infancia y la ciudadanía global (CREDI). Hemos hablado con cuatro de ellas (Nou Patufet de Barcelona, El Bosque Encantado de Madrid, Travesuras de Málaga y Fantasía de San Fernando en Cádiz) y les hemos preguntado por el cierre de sus centros, la reapertura, las consecuencias en los niños y niñas y el futuro del sector.

Para los profesionales el cierre de las Escuelas Infantiles 0-3 supone una evidencia de la desprotección que hay en el sector y del valor que tiene para la sociedad, como destaca Mariví de la Escuela Infantil Travesuras (Málaga) “la escuela infantil siempre ha sido y sigue siendo considerada como un recurso simplemente asistencial. Aunque la mayoría nos llama “guarderías”, no somos eso, somos escuelas infantiles, en las que no solo cuidamos de los más pequeños para que se sientan como en casa; también educamos, trabajamos por la infancia y, en nuestro caso, por nuestra comunidad”. 

Para UNICEF el primer ciclo de educación infantil es una etapa fundamental que mejora el bienestar de los niños y las niñas, favorece el desarrollo físico y emocional, promueve la igualdad de género y tiene un gran impacto en la equidad y la reducción de la desigualdad y la pobreza infantil, tal como se recoge en el Cuaderno para el debate 06 La garantía del derecho a la educación en la etapa 0-3 años: una inversión necesaria y rentable.

Pero el cierre de los centros educativos no ha supuesto una desconexión con las familias. “Las familias nos han seguido necesitando durante el confinamiento en muchos sentidos. Hemos mantenido contacto diario a través de redes sociales, videoconferencia, correo electrónico y nuestra app de comunicación. Les hemos enviado pautas a seguir con los peques en casa, recomendaciones de alimentación, rutinas y hábitos, actividades para hacer con ellos, tutorías personales para orientar a las familias ante dificultades presentadas en el confinamiento. En definitiva, somos un gran apoyo para las familias que se han visto en una situación nueva y desconocida y para sobrellevarla hemos colaborado en todo lo que nos han solicitado”, dice Marta, directora de la Escuela Infantil el Bosque Encantado de Madrid.

Hemos tenido que dejar de lado la vertiente pedagógica para poder atender la sanitaria

La reapertura de estos centros, que se ha dado en algunas Comunidades Autónomas como Madrid o Catalunya ha sido, como dice Vanessa, coordinadora de la Escola Cooperativa Nou Patufet “curiosa, hemos tenido que dejar de lado la vertiente pedagógica para poder atender la sanitaria. Los niños y niñas tenían muchas ganas de salir a la calle y recuperar la normalidad, al vernos buscaban nuestro afecto con abrazos y besos, que es a lo que están acostumbrados”.

“El vínculo emocional con sus educadoras de referencia se ha visto muy perjudicado y las familias nos llamaban porque los pequeños echaban mucho de menos tanto a los amigos como a las profesoras. Hemos notado sobre todo una pérdida de las rutinas y de autonomía de los niños y niñas, algo perfectamente natural al llevar tantos días en casa y al cambiar los horarios y costumbres en casa", comenta Marta directora de la Escuela Infantil el Bosque Encantado de Madrid.

A pesar de esto, todo tiene siempre un lado positivo, y todas las profesionales consultadas coinciden en lo bueno que para los niños y las niñas ha sido el “haber pasado este tiempo con sus familias, sin prisas, sin horarios”, como destaca Aurora del Centro de Educación infantil Fantasía. 

"En la primera infancia se construyen los pilares que sostendrán el crecimiento"

Muchas de las decisiones o de los efectos de la pandemia sobre este ciclo educativo están relacionadas con la percepción que la sociedad tiene sobre él. “El primer ciclo, es ese olvidado por la sociedad y por la administración pública, ese en el que se piensa que sólo se “guardan” a los niños mientras sus padres trabajan… En realidad, es donde se asientan las bases de la personalidad y del desarrollo. Los niños de ahora serán los adultos del mañana, y es en la primera infancia donde se construyen los pilares que sostendrán el crecimiento”, nos dice Mariví de la Escuela Infantil Travesuras.

Para Marta del Bosque Encantado, “El primer ciclo de educación infantil es absolutamente imprescindible no solo porque incide en una de las fases del desarrollo más importante del ser humano, sino por su papel básico en la conciliación de las familias y la incorporación al trabajo de la mujer tras la maternidad”. En ese sentido desde UNICEF abogamos por la universalización de la primera etapa de la educación infantil y trabajamos con las autoridades competentes para que así sea.

Los retos de la educación inicial para el próximo curso escolar

El impacto en la salud y la equidad del cierre de los centros educativos; la creación de entornos escolares saludables y seguros para los niños y niñas; la implementación de medidas de prevención, higiene y promoción de la salud adaptadas a la edad como rutina diaria, son alguno de los retos a los que se enfrentan todos los ciclos educativos a partir de septiembre, también el primer ciclo de educación infantil. En el caso de nuestras entrevistadas todas coinciden, como dice Aurora de Fantasía, en que el curso 2020/2021 va a ser “un curso intenso que va a necesitar de toda nuestra implicación y compromiso social”. Para Mariví de la Escuela Infantil Travesuras “Será un curso diferente, en el que tendremos que reinventarnos para seguir siendo comunidad educativa y centro referente, pero como se dijo antes: ante nuevas situaciones, nuevos retos. Lo esencial ahora es ser una escuela saludable y segura”.

Adriana Negueruela Macías

Técnico de Educación de UNICEF Comité de Madrid