Menstruación y educación ya son compatibles en Senegal

Para muchas chicas, tener la regla significa poner sus vidas en pausa. Gracias a tu ayuda, estamos llevando a cabo iniciativas para concienciar a las comunidades acerca de la importancia de facilitar la higiene menstrual para que ninguna niña se quede atrás.

Compresas de tela

El día 28 de mayo se conmemora el Día Mundial de Higiene Menstrual y, desde UNICEF, queremos aprovechar para hablar sobre un tema que sigue siendo un tabú, sobre todo en las comunidades más desfavorecidas donde no tienen acceso a información en torno a un proceso tan natural como este. En países como Senegal, tener la regla es todavía un estigma: las niñas se sienten avergonzadas y, a menudo, se las excluye de las escuelas y de otras actividades durante esos días. Por eso, trabajamos para ayudarles a derribar esas barreras y a eliminar los prejuicios sobre la menstruación.

Cuando a una niña senegalesa le viene la regla, a los cambios hormonales propios de la pubertad hay que sumarles el miedo y el temor a todo lo que está por venir. Su vida en ese momento cambia para siempre, empezando por la interrupción de su educación. La falta de acceso a baños funcionales y segregados, la información limitada sobre higiene menstrual y la falta de productos sanitarios hacen que las niñas pierdan hasta una semana de colegio al mes. Cuando vuelven y ven que no pueden seguir el ritmo de la clase, muchas acaban por abandonar sus estudios.

Imagen niñas sonriendo

UNICEF trabaja para que las niñas de Senegal no pausen su educación por culpa de la menstruación.

El plan de acción que estamos llevando a cabo gracias a tu colaboración con Unidos por los derechos de las niñas empezó por enseñar a 47 jóvenes, hombres y mujeres, a coser compresas de tela reutilizables. Pudimos ofrecerles una formación de 10 días en los que aprendieron a utilizar las máquinas de coser y confeccionaron 20.900 compresas que se distribuirán por las escuelas de todo el país. De esta manera, ayudamos tanto a las niñas que están en edad escolar a seguir con su día a día, como a los jóvenes de la comunidad a aprender un oficio y a ganar un dinero extra.

Además, las chicas están recibiendo en las escuelas los kits de dignidad de UNICEF , que incluyen productos de higiene, toallitas y todo lo que puedan necesitar cuando tienen la regla. Como nos explica Maissa Abdellaoui, especialista en empoderamiento de niñas y jóvenes de UNICEF en Senegal, “queremos que cada niña pueda aprender, jugar y cuidar de su propia salud sin experimentar estrés, vergüenza o barreras innecesarias durante la menstruación. Es una parte esencial para mejorar el acceso de las niñas a la educación”.

Mujer con una maquina de coser

Fatou es una de las jóvenes que participa en las clases de costura.

En el centro de formación, tuvimos la oportunidad de charlar con varias de las jóvenes que participan en esta iniciativa. Al hablar con ellas, nos dimos cuenta de que no son simples toallas higiénicas, es una mirada al futuro con esperanza:

  • Fatou, de 20 años, nos explicó que “este proyecto me está ayudando a aprender una profesión para ganarme la vida. Se está convirtiendo en una fuente de ingresos para mí y para mi familia y, además, sé que estoy ayudando a las niñas a tener una vida mejor”.
  • Rokhaya, de 18, cree que “si a las niñas se les da la oportunidad de tener voz y poder de decisión, podrán llegar a prosperar. Necesitan espacios abiertos y seguros donde puedan estar mejor informadas sobre sus cuerpos y tener confianza para tomar sus propias decisiones”.
  • Por su parte, Seynabou, de 18, nos contó que “las jóvenes de esta región aprenden sobre higiene menstrual a partir de su propia experiencia. Por eso necesitamos romper el silencio y lograr cambios en sus creencias y en sus hábitos cuando tienen la regla”.
Joven con maquina de coser

Cada vez son más las jóvenes que quieren formarse y ayudar a las niñas de su comunidad

Regla, periodo, menstruación… Podemos llamarlo de muchas formas, pero lo importante es hablar sobre ello, porque si no se habla, directamente no existe. El verdadero dolor menstrual que sufren millones de niñas en todo el mundo es el de la discriminación, principalmente debido a la falta de información o a la creencia en mitos que les obligan a recluirse y a ser excluidas de los espacios cotidianos.

Si queremos que las jóvenes tengan su derecho a la salud, a la educación y al empleo garantizado, tenemos que seguir trabajando para que las comunidades comprendan la importancia de la higiene menstrual. Gracias a tu apoyo podemos seguir derribando barreras y empoderando a las niñas de todo el mundo para que crean en ellas mismas y para que tengan la oportunidad que se merecen.

 
© UNICEF/UN0342250/Keïta
 
© UNICEF/UN0342250/Keïta
 
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Unidos por... los derechos de las niñas

Nacer niño o niña condiciona su vida.

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