Junto a los menores no acompañados
El riesgo de morir en el mar es solo una de las muchas tragedias a las que se enfrentan los niños y niñas que huyen de sus países de origen en busca de un futuro mejor. Por eso, desde UNICEF, estamos proporcionando asistencia humanitaria a los menores en tránsito más vulnerables a través del proyecto Protect.
Guerras, violencia, pobreza, hambre, emergencias… Las razones que empujan a los menores a huir solos de sus países de origen son de lo más variadas. Estos niños y jóvenes emprenden un viaje aterrador sin ningún tipo de compañía o apoyo, y lo más importante, sin ninguna garantía de que podrán llegar a su destino sanos y salvos. A menudo se lanzan al mar en botes abarrotados o en barcos de madera que no están preparados para largas travesías ni para condiciones climáticas extremas, poniendo su futuro en manos de totales desconocidos.
Las cifras de llegadas están aumentando, solo en Italia, entre enero y septiembre llegaron 11.600 menores no acompañados. Un 60% más que el mismo periodo del año pasado.
Una vez allí, algunos se resguardan en la bodega del barco, otros en la cubierta esperando ver tierra firme, otros en botes salvavidas… En definitiva, se lanzan al vacío en una aventura aterradora que, para muchos, es su única oportunidad de supervivencia. Sin embargo, la falta de capacidad de búsqueda, rescate y cooperación convierten rutas como la del mediterráneo central en una de la más peligrosas del planeta.
Solo entre los meses de junio y agosto de este año, al menos 990 personas, incluidos niños y niñas, murieron o desaparecieron mientras intentaban cruzar el mar, cifra que es tres veces mayor que la registrada durante el mismo período del verano pasado. Además, hay que tener en cuenta que muchos naufragios no dejan supervivientes y que otros ni siquiera se contabilizan, lo que hace que el número real de víctimas probablemente sea mucho mayor.
En palabras de Regina De Dominicis, Directora Regional de UNICEF para Europa y Asia Central y Coordinadora Especial para la Respuesta a Refugiados y Migrantes en Europa, “el mar Mediterráneo se ha convertido en un cementerio para los niños y, también, para su futuro. El trágico número de muertes entre los niños que buscan asilo en Europa es el resultado de decisiones políticas deficientes y de un sistema migratorio en crisis. Para evitar que más niños y niñas sufran, se necesita desesperadamente adoptar una respuesta a nivel europeo y un aumento de la ayuda internacional.
Sabemos que no tenemos ni un minuto que perder y, por eso, queremos hablarte sobre el lanzamiento del proyecto Protect, orientado a proteger a los niños y niñas en tránsito. Esta acción está destinada a garantizar los derechos de 20.000 niños, adolescentes, jóvenes y mujeres refugiadas y migrantes en Europa, y cuenta con el apoyo de miles de representantes de UNICEF en aquellos lugares donde más se nos necesita.
Los niños y niñas en tránsito son, ante todo, niños, y necesitan protección. Sin embargo, el sistema actual no cumple con el derecho de estos niños vulnerables. Los Estados tienen la responsabilidad de defender sus derechos y proteger a todos los niños dentro de sus fronteras, sin excepción alguna, pero lamentablemente las medidas que se están tomando a nivel global no son suficientes para dar respuesta a la situación migratoria actual.
Por eso, gracias a la colaboración de la Comisión Europea, de las autoridades nacionales y locales y de personas como tú, desde UNICEF estamos trabajando para reforzar la capacidad de los sistemas de acogida. Así, podemos identificar los casos de riesgo, proporcionar atención psicológica, derivar a quien lo necesite a servicios especializados como la prevención de violencia de género y prestar apoyo psicosocial.
Otro de los escollos a los que se tienen que enfrentar los jóvenes migrantes es a la falta de oportunidades una vez llegan a su país de acogida. Por ello, tenemos equipos de UNICEF desplegados en los centros de recepción e identificación de personas refugiadas en toda Europa que atienden a los menores y jóvenes no acompañados, especialmente los que están a punto de cumplir 18 años. Una vez allí, les ayudamos a identificar sus habilidades profesionales y a encontrar un trabajo, a la vez que les ofrecemos un apoyo total a nivel jurídico y psicosocial.
A pesar de los avances que poco a poco se van consiguiendo en materia de acogida y de la buena voluntad de los agentes del cambio, desde UNICEF, pedimos algo tan sencillo como que se respete el derecho internacional y la Convención sobre los Derechos del Niño. Por esa razón, instamos a los gobiernos, y trabajamos con ellos, para que se tomen de manera urgente las siguientes medidas:
- Proporcionar rutas más seguras y legales donde buscar asilo.
- Garantizar que los niños no sean retenidos en instalaciones cerradas.
- Fortalecer los sistemas nacionales de protección infantil para proteger mejor a los menores que se ven obligados a huir de su país.
- Coordinar todas las posibles operaciones de búsqueda y salvamento.
- Garantizar el desembarco en lugares seguros.
El proyecto Unidos por los refugiados y migrantes es vital para que los menores no acompañados que se ven obligados a escapar de sus países de origen como última esperanza tengan una oportunidad de salir adelante. Sin embargo, estos niños y niñas necesitan que pasemos de las palabras a los hechos. Por eso, en nombre de todos ellos, queremos darte las gracias por formar parte de nuestra red de colaboradores. Entre todos, haremos posible lo imposible.