En Costa de Marfil, las niñas y adolescentes tienen mayor probabilidad de abandonar la escuela por el solo hecho de ser niñas. Siendo la escuela su principal entorno protector, al hacerlo quedan expuestas a situaciones de abuso y explotación.
En UNICEF trabajamos con la comunidad educativa de las zonas más vulnerables del país para generar un entorno escolar que no expulse a las jóvenes y que esté concienciado con sus derechos. Concretamente, reforzamos la formación del profesorado, distribuimos materiales pedagógicos y construimos nuevas aulas y espacios para que puedan desarrollar un mejor rendimiento académico y fomentar la participación. A su vez, creamos una gran red de personas (mentores y voluntarios) que acompañan a las niñas en su actividad escolar.
Esta intervención tiene características particulares que la hacen muy innovadora porque, gracias a una tecnología reciente, las nuevas aulas se construyen con materiales más resistentes y aislantes. El país cuenta con la principal fábrica de reciclaje de toda África, y allí se transforma el plástico de los vertederos de la capital en ladrillos que sirven como material para construir las aulas. La fábrica, a pleno rendimiento, está reciclando 9.600 toneladas de residuos plásticos al año, ayudando no sólo a que las escuelas tengan más aulas sino al cuidado del medioambiente.
*Desde 2018
La importancia de volver a la escuela
Según un proverbio africano, cuando una niña va a la escuela se educa a toda una nación. Sin embargo, miles de niñas marfileñas no disfrutan de este derecho y muchas se ven empujadas, a edades muy tempranas, hacia el matrimonio infantil, el trabajo doméstico y otras situaciones de explotación.
Como Djeneba, en Odienné, en el norte de Costa de Marfil, quien tuvo que abandonar sus estudios con apenas 14 años. Afortunadamente, gracias a sus compañeros, un profesorado preparado, toda una red de apoyo que trabajó con su familia y los servicios sociales, pudo volver a la escuela y ha terminado con las mejores notas de su clase. Actualmente, Djeneba participa en campañas de sensibilización para promover el derecho a la educación.
-Djeneba, una niña de Odienné que ha podido volver a la escuela
UNICEF en acción
Nuestra prioridad en Costa de Marfil ha sido la educación de las niñas y adolescentes que, por su situación de vulnerabilidad, corrían el riesgo de abandonar la escuela. Para ello:
- Formamos a los profesores y demás personas que trabajan con las niñas, para que a través del uso de las tecnologías pudieran continuar la educación aún en tiempos de pandemia, dotándolos también de recursos para evitar el abandono escolar.
- Construimos aulas nuevas con materiales reciclados, acompañado de acciones de concienciación en torno a la protección del medioambiente.
En 2020 conseguimos grandes resultados
Más de 9.000 niñas y niños
en un entorno escolar protector, saludable y de participación, con recursos para evitar el abandono escolar .
Más de 17.000 estudiantes en aulas y espacios de lectura
construidos con materiales reciclados en las regiones de Folon, Bafing y Kabadougou.
Casi 3.000 profesores, directores, inspectores y asesores
formados en el uso de las tecnologías para dar continuidad a la educación en el marco de la pandemia.
15.000 niños, niñas y adolescentes
participaron en acciones de movilización y sensibilización sobre los derechos de las niñas y el medioambiente.