El matrimonio infantil refleja una clara vulneración de los derechos de las niñas y suele estar más arraigado entre aquellas que viven en comunidades rurales, que tienen menos acceso a información y a servicios esenciales, como la educación, lo que las deja en situación de mayor vulnerabilidad. En Mozambique esta práctica está muy extendida, alcanzando una de las tasas más altas del mundo: el 48% de las mujeres de entre 20 y 24 años se casó o estaba en una unión sentimental antes de los 18 años.
En UNICEF trabajamos para generar cambios en las normas y comportamientos sociales que sustentan estas prácticas de violencia contra la infancia. Para ello, promovemos el conocimiento de los derechos de los niños entre los líderes comunitarios, las familias y la sociedad en general para alcanzar un mayor compromiso en su cumplimiento.
Fomentamos la participación y el empoderamiento de las niñas y adolescentes, sobre todo de aquellas que están en mayor riesgo o ya han sufrido la práctica del matrimonio infantil o la violencia, y también el acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva.
*Desde 2018
UNICEF en acción
En 2020 nos hemos enfrentado a las restricciones ocasionadas por la pandemia de COVID-19, que interrumpieron muchas de las actividades basadas en la comunidad, sin embargo, impulsamos una mayor implicación de las familias y de la sociedad en general para que los derechos de todos los niños y, especialmente de las niñas, sean una realidad en el país.
En 2020 conseguimos grandes resultados
210.840 llamadas de niñas y niños
atendidas en la línea que registra todas las denuncias de posibles casos de violencia.
372.593 adolescentes
informados a través de actividades sobre salud sexual y reproductiva, matrimonio infantil y violencia contra la infancia.
880 adolescentes
participaron en programas de radio sobre protección de la infancia.
19.599 personas
concienciadas y comprometidas con los derechos de la infancia en varias comunidades.