¿Qué pedimos?
Mirar dentro de ti es el primer paso para romper el muro de la discriminación, el miedo y los prejuicios. Con tu ayuda, con tu impulso, tendremos más fuerza para derribar los obstáculos a los que se enfrentan los niños refugiados y migrantes en Europa. Esto es lo que queremos conseguir:
Acabar con el racismo y la xenofobia
Fin de las detenciones
Fin de la violencia y la explotación
Reunificación familiar
Acceso a la educación
Acceso a la sanidad
Historias reales
Malick, 18 años (Guinea Conakri)
Tardó un año y medio en llegar a España después de pasar por Mali, Argelia y Marruecos atravesando el desierto y cruzando el mar en patera. "En todos los lugares hay buenas y malas personas, pero todos somos humanos".
Nora, 18 años (Marruecos)
Cuando Nora llegó a nuestro país por primera vez todo le parecía diferente. Hoy trata de llevar una vida normal como cualquier chica de su edad. "A veces la gente generaliza y me molesta. Ser musulmana no es ser terrorista. Yo soy musulmana y no soy terrorista".
Nour, 22 años (Marruecos)
Al cumplir 18 años tuvo que empezar de cero. Salió del centro de menores y abandonó su sueño de estudiar psicología, pero no ha dejado de luchar. "La gente es racista sin darse cuenta. Es un muro mental que no te deja ir más allá de lo que tienes en la cabeza".
Ilyas, 19 años (Marruecos)
"Claro que me siento diferente porque soy extranjero". Tenía 15 años cuando llegó a España y desde entonces no ha parado de derribar obstáculos. "Hay que seguir luchando día a día para conseguir los sueños". Le apasiona la cocina.
Ihab, 19 años (Marruecos)
Ihab ha podido desarrollar en España su pasión por el fútbol. Cuando tenía 9 años le amputaron la pierna, pero eso no le ha impedido alcanzar su sueño. "Cada día entrenaba duro y aprendía viendo vídeos de YouTube". Hoy juega en la selección de fútbol de personas con discapacidad.
¿Qué hacemos?
En UNICEF trabajamos para mejorar las vidas de los niños refugiados y migrantes en sus países de origen. Además, estamos presentes durante el viaje para garantizar su salud y protección. Una vez en Europa, movilizamos a los gobiernos para introducir cambios en las leyes y garantizar su bienestar.
A pesar de todo, queda mucho por hacer. Queremos animaros a seguir rompiendo el muro de la discriminación que nos separa de los niños migrantes y refugiados que ya viven entre nosotros. Un muro que nos impide ver al niño antes que al migrante o al refugiado.
Comparte este vídeo y #RompeelMuro