TheUnescape Room

El primer escape room del que no se puede escapar.

73 Millones de niños y niñas trabajan cada día
en las condiciones más extremas.

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Tú puedes ser su botón
de emergencia

Una mina, una fábrica, un basurero, una plantación… no son lugares para niños. Sin embargo, 73 millones de niños se levantan cada día para trabajar en las condiciones más extremas, poniendo en peligro su salud, su educación y su futuro.

Firma y suma tu voz a UNICEF contra la explotación infantil.


 
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Reacciones
de los participantes

Esto es lo que se siente cuando no puedes escapar.

Iván

Técnico de proyectos - 43 años.

Borja

Game máster - 29 años.

Marta

Farmacéutica - 29 años

Pablo

Profesor de secundaria - 55 años

Patricia

Agente de seguros - 40 años

José

Abogado - 44 años

Trabajar en las peores condiciones

152 millones de niños y niñas trabajan en el mundo. Y más de la mitad, 73 millones, lo hace en condiciones extremas y peligrosas que amenazan su seguridad, salud, educación y desarrollo. No tienen salida alguna. Viven explotados, sin escapatoria. La mayoría en África Subsahariana y Asia. Y si no actuamos ya, les condenamos a una vida de pobreza y exclusión.

Trabajan en minas, respirando aire tóxico, de sol a sol, manipulando con sus manos desnudas sustancias químicas peligrosas, en vertederos, en las calles, en fábricas. También en plantaciones manejando maquinaria peligrosa, como empleadas domésticas, a veces a cambio de deudas, y sufriendo castigos y abusos por parte de sus empleadores.

¿Sigues pensando que 
solo somos una cifra?

1/4

de los niños que trabajan en condiciones peligrosas tienen menos de 12 años.

36millones

de niñas entre 5 y 14 años realizan tareas domésticas más de 21 horas semanales

9de cada10

niños que trabajan en el mundo viven en África Subsahariana o Asia

Historias reales

Kalala

Kalala, 12 años, República Democrática del Congo. Tenía 5 años cuando empezó a trabajar en las minas de diamantes.

Hadiza

Hadiza, 15 años, Níger. Trabajaba vendiendo en las calles, los hombres le pedían que se acostara con ellos y lo dejó.

Mohamad

Mohamad, 15 años, Siria. Sus manos están destrozadas por el trabajo que realiza cada día en una fábrica de cemento.

Rei Seng

Rei Seng, 13 años, Myanmar. Gana 3 euros asfaltando caminos, trabajando una media de 52 horas a la semana. 

Halima

Halima, 10 años, Costa de Marfil. Trabajaba en el campo recogiendo cacao, metiéndolo en sacos y transportándolos.

Yasmin

Yasmin, 14 años, Asentamiento de Ghazieh (Líbano). Trabaja en el campo para pagar el alquiler de una habitación donde vive con su hermano pequeño.