Membres d’UNICEF tornen al seu país a fi d’ajudar en la resposta a la catàstrofe al Japó
“Si puc ser útil, m’estime més anar-hi”, va dir Miho Fukuhara, oficial d’Afers Intergovernamentals d’UNICEF que torna al Japó a ajudar el seu país a recuperar-se després dels desastres d’este mes.
Fukuhara, al igual que otros miembros que también han vuelto, se unirá al equipo sobre el terreno de UNICEF en Japón, queevalúa las necesidades y ofrece asistencia técnica en la región.
UNICEF está proporcionando ropa para niños yjuguetes donados por su aliado, IKEA.También ha enviado sus kits de Escuelas en una maleta,recreativos y para el desarrollo de la primera infancia.
"Es tan triste ver la situación", dijo. "La magnitud de la tragedia es enorme. Una tercera parte de Japón se encuentra afectada y tenemos también un problema con la planta nuclear, así que es un asunto de todos los japoneses", añadió Fukuhara.
Los efectos sobre los niños
Las escuelas volverán a abrir sus puertas en las zonas afectadas en abril, fecha de comienzo del nuevo año escolar.
Una de las principales preocupaciones de UNICEF es contribuir agarantizar que no se interrumpa la educación de los niños y que reciban apoyo psicológicopara recuperarse.
"Lo que podemos hacer como organismo internacional es brindar apoyo a los niños afectados por la catástrofe", manifestó Fukuhara. "También tenemos que empezar a pensar a medio y largo plazo en cómo minimizar los efectos de la tragedia, especialmente para los niños".
Una tragedia sin precedentes
El terremoto que sacudió Japón el 11 de marzo provocó un maremoto devastador y, a su vez, un accidente en la central nuclear de Fukushima.
Se estima que hay más de 9.400 muertos, casi 15.000 desaparecidos y unas 300.000 personas se encuentran sin hogar en medio de temperaturas bajo cero.