Viaje de socias a Perú: 5 días de alegrías, buenas noticias y mucha esperanza
Las caras de Macarena, Beatriz, Mar y Carmen en el aeropuerto de Barajas hablaban por sí solas.
Hablaban de la emoción, los nervios y las ganas de comenzar la increíble experiencia que les había tocado vivir: ver con sus propios ojos cómo su ayuda está cambiando la vida de miles de niños.
Estas 4 comprometidas socias de UNICEF ganaron este año el sorteo para conocer nuestros proyectos en la selva amazónica de Perú. Las acompañamos en el viaje 2 trabajadoras del comité español de UNICEF que compartimos con ellas 5 días de alegrías, buenas noticias y mucha esperanza.
El pasado mes de septiembre, todas nosotras pudimos comprobar que la situación de los niños en la región de Loreto ha mejorado radicalmente en los últimos años. Los niveles de desnutrición se están reduciendo, el sistema de salud se ha fortalecido consiguiendo evitar que enfermedades como el Zika se extiendan de forma descontrolada y se ha introducido un modelo de baño ecológico que ha supuesto un antes y un después en la vida de los niños y sus familias.
Viaje de socios a Perú: los niños, en el centro
Los compañeros de UNICEF en Perú y las ONG con las que trabajan han tenido muchísimo que ver en esto. El enfoque integrador de todos sus proyectos permite que la colaboración de personas como nuestras socias impacte en todas las esferas de la vida de un niño.
"Cualquier excusa sirve para vigilar la situación de los niños en una comunidad: saber si van a la escuela, si tienen puestas las vacunas... El objetivo de UNICEF son los niños. He visto cómo en cualquier proyecto o programa los niños están en el centro. Es lo primordial, lo más importante y lo que más me ha llenado", cuenta Carmen.
También hemos podido comprobar que las acciones de UNICEF en terreno son sostenibles en el tiempo. Mar tiene muy claro cómo se consigue esto:
"En vez de dar soluciones puntuales a problemas puntuales, se empodera a la población para que ellos aprendan a manejarse y ya quede implantado en su día a día porque han aprendido a hacerlo ellos".
Pero si hay algo en lo que todas las socias coinciden es en la fortaleza y la dignidad de todas las familias que conocimos en la región de Loreto. Aunque ha habido grandes progresos en materia de desarrollo, la desigualdad sigue siendo un problema patente al que miles de personas se enfrentan con valentía cada día.
Viaje de socias a Perú: "Lo que más me ha gustado es ver a los niños sonreír"
"A mí lo que más me ha gustado es ver a los niños sonreír. En unas circunstancias en las que no todos estaríamos igual de contentos, ellos disfrutan, juegan, van al colegio... Ver eso, que disfrutan de la vida y que hacen lo que deben hacer los niños: ser felices", admite Beatriz.
Sin duda, este ha sido un viaje del que todas volvemos convencidas de que podemos seguir haciendo sonreír a millones de niños. Porque cada vez sois más las personas que confiáis en nuestro trabajo y que nos ayudáis a cambiar vidas en todo el mundo.
Como dice Macarena, "no podemos imaginar el cambio que supone para los niños que la escuela a la que van tenga un baño donde puedan hacer sus necesidades sin tener que salir fuera y exponerse a las alimañas, a los abusos, a las inclemencias del tiempo. Es tremendo que con una pequeña aportación consigamos cosas tan importantes para una comunidad".
Y tú, ¿te animas a viajar con nosotros el año que viene? Si eres socio de UNICEF, permanece atento porque faltan solo unos meses para un nuevo sorteo del viaje que puede revolucionar tu vida.