¿Cómo afecta el Pacto de Estado contra la violencia de género a los niños?
En lo que llevamos de 2017, 32 mujeres y 6 niños han sido asesinados en el contexto de crímenes relacionados con la violencia de género. También han quedado huérfanos 16 menores de 18 años.
© UNICEF/Carolina Sainz
La cifra de niños y niñas fallecidos a mitad de año por este motivo está ya a la altura del total de niños muertos en 2013, primer año en el que se recogieron estadísticas específicas sobre menores de edad. Es el número más alto hasta la fecha.
Tal y como expresábamos hace unos años, los niños y niñas que sufren violencia están en demasiadas ocasiones “tras las puertas cerradas” de sus hogares y pocas veces se valora suficientemente el impacto de la violencia de género sobre los niños y las niñas.
Este impacto, tanto directo (en forma de violencia física o emocional dirigida al niño, incluso por la pareja de una adolescente) como indirecto (como testigos de la violencia contra la mujer), tiene o puede tener a su vez importantes consecuencias en su desarrollo cognitivo, emocional y social.
Pacto contra la violencia de género: avances para los niños
Desde entonces se han producido algunos avances; entre los más recientes el desarrollo de la ley de 2015 de modificación del sistema de protección a la infancia y a la adolescencia. Esta normativa modificaba la Ley de protección contra la violencia de género de 2004 incluyendo específicamente a los hijos e hijas menores como víctimas junto a la mujer, y estableciendo la necesidad de que los jueces se pronuncien sobre las medidas de protección de los niños respecto al agresor o presunto agresor.
La más reciente es la aprobación —por la Comisión de Igualdad del Congreso de los Diputados— de un Pacto de Estado contra la violencia de género en nuestro país, que es sin duda un hito y una contribución más en la garantía de los derechos de todas las víctimas: mujeres, niños y niñas. Un pacto que contribuirá en gran medida al desarrollo efectivo de la normativa de 2015 en lo que se refiere a la infancia.
Pacto contra la violencia de género: más de 200 medidas
Muchas de las más de 200 medidas consensuadas tienen como objetivo a los niños y niñas. Es difícil citarlas todas aquí, pero sí podemos poner algunos ejemplos de situaciones que podrían mejorar con la aplicación de las medidas del Pacto.
- María*, hija de una mujer fallecida por violencia del padre de la familia. Ella será considerada víctima directa y existirán medidas y servicios más adecuados para protegerla y asistirla. Y recibirá una pensión de orfandad de forma inmediata por violencia de género a través de un reconocimiento expreso de su situación.
- Lucía y Lucas ya no tendrán que seguir el régimen de custodia compartida con su progenitor, denunciado por maltrato, y contarán con apoyo psicólogo y pedagógico.
- Y Anna, como hija de una mujer víctima de trata, es reconocida como víctima igualmente y beneficiaria de protección junto a su madre.
- Jorge, Patricia, Naima, Emma y Alberto tratarán en clase el tema de la violencia de género, y aprenderán sobre igualdad de género, educación afectiva y sexual, y sobre cómo prevenir e identificar la violencia machista.
Pacto contra la violencia de género: un paso por los Derechos Humanos
Y además este Pacto incorpora todos los tipos de violencia contra la mujer contenidos en el Convenio de Estambul: matrimonios forzados, mutilación genital femenina, trata de mujeres y niñas con fines de explotación sexual y agresiones sexuales. Sin duda, un paso más por los derechos humanos.
En conclusión, este Pacto avanza a la hora de situar a la infancia en el lugar que le corresponde como víctima también de la violencia de género, pero su desarrollo e implementación no deben impedir otros avances necesarios en la violencia contra los niños y niñas en otros contextos y situaciones, por lo que UNICEF y otras muchas organizaciones de infancia seguimos abogando por el desarrollo de una ley integral de violencia contra la infancia.
La violencia de género, la violencia contra la infancia, es un asunto de todos, y la implicación de todos los niveles de la Administración es un imperativo en este Pacto. Confiamos en que así sea.