Cuenta atrás 2015: mujeres, niños y niñas a la espera de que se cumplan objetivos
De acuerdo con el último informe de la serie «Cuenta atrás 2015: Supervivencia maternal, neonatal e infantil», apenas algunos de los 68 países que suman el 97% de las muertes maternoinfantiles del mundo están logrando progresos adecuados para proporcionar los cuidados de salud críticos necesarios para salvar las vidas de mujeres, bebés y menores de 5 años
Parlamentarios y líderes mundiales se reúnen en Ciudad del Cabo (Sudáfrica) para acelerar los progresos en reducción de la mortalidad maternoinfantil. Esta importante cita coincide con la presentación mundial de un informe que analiza la situación mundial respecto al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio relacionados con la supervivencia de niños, niñas y madres. De acuerdo con este informe, elaborado por varios organismos internacionales entre los que se encuentra UNICEF, es necesario un esfuerzo conjunto aún mayor para lograr alcanzar los objetivos 4 y 5 para 2015.
Tragedias evitables
Más de 10 millones de mujeres, niños y niñas mueren cada año por causas evitables y tratables. La mayoría de las muertes maternoinfantiles tienen lugar en África y el sur de Asia, especialmente en los países del África subsahariana. Aunque apenas uno de cada 5 niños y niñas nace en África subsahariana, el 50% de las muertes infantiles del mundo ocurren en esta región. Por ejemplo, las mujeres de Níger viven afrontando que 1 de cada 7 morirán durante el embarazo o el parto.
El pasado año ha visto grandes progresos en las tasas de reducción de muertes infantiles, ya que por primera vez en la historia estas han bajado de los 10 millones anuales. Esto es posible gracias a intervenciones sencillas y de bajo coste como el uso de mosquiteras tratadas con insecticida, para prevenir el paludismo, las vacunaciones, los suplementos de vitamina A o el fortalecimiento de los servicios comunitarios de salud.
El acceso a estos servicios es crítico durante los partos y en las primeras semanas tras el parto, que son las más peligrosas para las madres y los bebés.
Sin embargo, la mayoría de las mujeres y niños aún no tienen acceso a tratamientos para enfermedades potencialmente mortales y otros servicios críticos de salud. Estos servicios dependen de sistemas de salud pública fuertes que puedan proporcionar servicios de atención las 24 horas del día en los centros de salud de las comunidades y que además dispongan de un sistema de referencia para cuando se necesitan intervenciones más serias. El acceso a estos servicios es especialmente crítico durante los partos y en las primeras semanas tras el parto, que son las más peligrosas para las madres y los bebés.
Oportunidades perdidas y progresos en algunos países
El informe identifica una serie de oportunidades perdidas para salvar vidas:
- El acceso a métodos de planificación familiar.
- Los cuidados especializados durante el parto.
- Los cuidados clínicos para los niños y niñas enfermos
- El tratamiento de la malnutrición
A pesar de estas oportunidades desaprovechadas, el informe también destaca que algunos países, como China, Haití, Turkmenistán y algunos países africanos han logrado progresos en la reducción de la mortalidad infantil en los últimos 3 años. Dieciséis de los 68 países que el informe considera prioritarios están en camino de lograr el Objetivo de Desarrollo del Milenio número 4.