En el mundo a cada rato
Notas de los directores de "En el mundo a cada rato" El 29 de octubre se estrena esta película que narra cinco historias relacionadas con las cinco prioridades de UNICEF. Los directores de este proyecto han querido compartir alguna de sus impresiones acerca de los motivos que les han llevado a participar, de las experiencias que han vivido y del proceso de rodaje.
Los cinco han participado desinteresadamente en el proyecto, pero coinciden en afirmar que han ganado más de lo que han aportado. Patricia Ferreira, con "El secreto mejor guardado", Pere Joan Ventura, con "La vida efímera", Chus Gutierrez, con "Las siete alcantarillas", "Javier Corcuera con "Hijas de Belén" y Javier Fesser con "Binta y la gran idea" nos ofrecen una visión de la vida cotidiana de niños y niñas que se encuentran lejos de nosotros en en mapa, pero que no deberían estar lejos de nuestros corazones.
1. Patricia Ferreira: El secreto mejor guardado Cuando la productora “TUS OJOS” y UNICEF-ESPAÑA me propusieron unirme a su proyecto, no lo dude un momento. Quería hablar de los niños afectados por el SIDA. No sabía a dónde podríamos llegar, ni siquiera si alguien se interesaría por ver lo que íbamos a hacer, pero la propuesta se convirtió en una necesidad que me agarró por el cuello y no me ha soltado hasta el día en que he podido comunicar mi inquietud y mi sensación de fracaso a los que vais a ver esta película.
Todo en EL SECRETO MEJOR GUARDADO es real, nada es inventado, la ficción del guión sólo es ficción en su estructura cinematográfica. Esos niños existen y viven y, quizá algún día cercano, ya no vivirán. Krishna Kumar y Aishawarya son actores. Son niños sanos que encarnan a niños enfermos o afectados por el SIDA. Pero RAVI y KRISHNAVENI, los personajes que ellos interpretan, no son nombres inventados. Niños como los nuestros, que viven en pueblos como los nuestros, pero que ven desmoronarse su entorno sin entender lo que pasa cuando la enfermedad, la marginación y, sobre todo, la pobreza se convierten en un cerco sin salida.
2. Pere Joan Ventura: La vida efímera Quería abordar la tercera prioridad de UNICEF: “Inmunización y más”, es decir la vacunación y la prevención de enfermedades en los niños que, hasta los cinco años viven el periodo más frágil y delicado de su existencia. Viajamos a Guinea Ecuatorial motivados por una campaña de vacunación que se estaba preparando, pero nos topamos de frente con una enfermedad maldita y devastadora: el paludismo, también conocido como malaria.
A veces el olvido, o la potencia de otras plagas como el SIDA, el nuevo azote del continente africano, hace pensar que los males antiguos han desaparecido. Se habla poco de ellos. Pero ahí está el paludismo, segando diariamente la vida de 2.000 niños africanos. El sueño de una vacuna para combatirlo sigue siendo un sueño, y en Guinea Ecuatorial es la causa principal de la mortalidad infantil. Durante el rodaje comprobamos un viejo tópico: La realidad supera a la ficción. Y a veces es difícil traspasarla a la pantalla.
3. Chus Gutierrez: Las siete alcantarillas Manuel García Serrano me invitó a participar en el proyecto y me sugirió que leyera un guión de Inés Almirón. Leí la historia y me gustó mucho el punto de vista. Una niña nos narra su vida cotidiana desde la más absoluta naturalidad, sin interpretaciones, sin juicios ni comparaciones. Su realidad es lo que conoce y lo que vive cada día y así nos lo cuenta. Me gustaba la idea, me gustaba el guión, me gustaba la inexperiencia de Manuel como productor y me gustaba la idea de hacer algo útil.
Rodamos en Argentina. Mi idea desde el principio era trabajar con personajes reales. No quería actores, ni figuración, ni todo el montaje que conlleva un rodaje de ficción. Íbamos a trabajar con los niños de la Villa, en su entorno, con sus ropas y con su realidad. Digamos que era una extraña mezcla entre ficción y realidad. Como experiencia, por unos días de tu vida viajas a otro lugar del planeta, entras en la vida de otras personas, compartes su realidad, sus problemas, la situación del país, te ríes con ellos, compartes el frío, el bocadillo y el polvo y después de quince días te das cuenta de que has pasado mucho tiempo a su lado. Les tienes afecto y ellos a ti. Se ha creado un vínculo. Tu vuelves a coger tu avión y regresas a tu mundo en el que formas parte "del linaje de los que tienen"...y quizás no les vuelva a ver.
4. Javier Corcuera:Hijas de Belén Me hablaron de la posibilidad de rodar en América Latina y decidí viajar a Iquitos, una zona de la Amazonía del Perú donde hay un abandono absoluto, y donde conocimos a los niños del barrio de Belén. Al conocer esa realidad nos dimos cuenta de que la problemática del niño amazónico es totalmente desconocida incluso dentro del Perú
Creo que es importante que desde el cine y otros sectores se ponga la mirada en estos temas, por eso la propuesta para participar en el proyecto me pareció una forma útil de sensibilización.
5. Javier Fesser:Binta y la gran idea
He trabajado en varias ocasiones con niños pero nunca había trabajado PARA ELLOS. Y no me refiero a los niños como destinatarios sino como principales beneficiarios del asunto.
Era fácil intuir que haciendo una película a medias con un buen puñado de ellos de una aldea perdida en el Africa subsahariana íbamos a aprender más nosotros que ellos. Pero nadie hubiera imaginado tanto. Ni tan hermoso. Ni tan útil. Ni tan imprescindible. Todos los miembros del quipo hubiéramos pagado dinero por tener el privilegio de hacer este trabajo. ¿Se puede pedir mas? ¿Qué hemos hecho nosotros para merecer un regalo así?