Estado Mundial de la Infancia: 2 de cada 3 niños no se alimentan adecuadamente
Amira Ousman tiene 9 meses y vive en Sudán del Sur. Estaba al borde de la muerte cuando llegó a un centro apoyado por UNICEF. Bastaron 8 semanas para que recuperara la sonrisa. Conoce su historia.
15/10/2019
Somos lo que comemos. ¿Lo has escuchado muchas veces, verdad? Amira Ousman, una bebé de 9 meses de Sudán del Sur, tenía desnutrición aguda grave. Estaba al borde de la muerte porque sus padres no la habían podido alimentar bien. Cuando llegó a nuestro de centro, estaba muy débil: no podía erguirse, como hacen la mayoría de bebés de su edad, y hablaba muy poco.
Ocho semanas después, con tratamiento a base de alimento terapéutico y mucho amor, Amira parece otra persona: ha engordado 1 kilo y medio, se mantiene de pie sin ayuda e incluso camina unos pasos, se interesa por las actividades cotidianas y sonríe mucho. Ahora come bien y, por tanto, se encuentra bien.
Un número alarmantemente elevado de niños, 2 cada 3 en el mundo, sufre las consecuencias de una mala alimentación y de un sistema alimentario que no tiene en cuenta sus necesidades. Así lo revela nuestro nuevo informe El Estado Mundial de la Infancia (EMI) 2019: Niños, alimentos y nutrición, que ofrece el análisis más completo hasta la fecha de la malnutrición infantil en todas sus formas en el siglo XXI. Describe una triple carga de malnutrición en niños menores de 5 años:
- La desnutrición, que puede ser crónica (retraso en el crecimiento) y sufren 149 millones de niños en el mundo, o aguda (emaciación) y padecen unos 50 millones.
- El hambre oculta, causada por la falta de vitaminas y nutrientes esenciales (como la vitamina A y el hierro). Afecta a 1 de cada 2 niños, unos 340 millones.
- El sobrepeso y la obesidad, que alcanza a unos 40 millones de niños.
“A pesar de todos los avances tecnológicos, culturales y sociales de las últimas décadas, hemos perdido de vista este hecho fundamental: si los niños comen mal, viven mal”, explica la directora ejecutiva de UNICEF, Henrietta Fore.
Estado Mundial de la Infancia: malnutrición desde el nacimiento
El informe advierte que las malas prácticas alimentarias comienzan desde los primeros días de la vida de un niño. Por ejemplo, a pesar de que la lactancia materna puede salvar vidas, solo el 42% de los bebés menores de 6 meses son alimentados exclusivamente con leche materna.
Y cuando los bebés comienzan a consumir alimentos blandos o sólidos a partir de los 6 meses, a muchos de ellos se les suministra el tipo incorrecto de dieta. Esta situación puede perjudicar su desarrollo cerebral, interferir con su aprendizaje, debilitar su sistema inmunológico y aumentar el riesgo de infección y, en muchos casos, de muerte. En todo el mundo, cerca del 45% de los bebés de entre 6 meses y 2 años no recibe ninguna fruta o verdura, y cerca del 60% no come huevos, productos lácteos, pescado o carne.
A medida que los niños crecen, su exposición a los alimentos poco saludables es alarmante, debido en gran medida a la publicidad y la comercialización inapropiadas, a la abundancia de alimentos ultraprocesados tanto en las ciudades como en zonas remotas, y al aumento del acceso a la comida rápida y a las bebidas altamente edulcoradas.
Por ejemplo, el informe muestra que el 42% de los adolescentes que asisten a la escuela en los países de ingresos medios y bajos consumen refrescos al menos una vez al día, y el 46% ingiere comida rápida una vez a la semana. Esas tasas ascienden al 62% y al 49%, respectivamente, en el caso de los adolescentes de los países de altos ingresos.
Como resultado, los niveles de sobrepeso y obesidad en la infancia y la adolescencia están aumentando en todo el mundo, incluso en África. Entre 2000 y 2016, la proporción de niños de entre 5 y 19 años con sobrepeso se duplicó, pasando de 1 de cada 10 a casi 1 de cada 5.
Por otra parte, la mayor carga de la malnutrición en todas sus formas recae sobre los niños y adolescentes de las comunidades más pobres y marginadas. En el informe también se señala que los desastres relacionados con el clima causan graves crisis alimentarias.
Estado Mundial de la Infancia: obesidad infantil en España
En el caso de España, el 35% de los niños de 8 a 16 años tiene exceso de peso, debido a causas como la ingesta de una dieta inadecuada o un exceso de hábitos no saludables como el uso de medios de transporte para desplazamientos cortos o demasiado tiempo frente a pantallas. Es lo que se desprende del informe Malnutrición, obesidad infantil y derechos de la infancia en España, que hemos elaborado junto a la Gasol Foundation.
“Nos preocupan mucho estas cifras. Una alimentación no adecuada implica riesgos para la salud de nuestros niños, niñas y adolescentes”, afirma nuestro director ejecutivo, Javier Martos. “Y no solo para la salud física, puesto que la obesidad se relaciona también con un peor rendimiento escolar y aumenta las posibilidades de sufrir trastornos de autoestima”.
España es uno de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) con mayores tasas de sobrepeso, ya que se sitúa en el puesto 10 de 41. Esto supone que 1 de cada 3 niños y adolescentes está en una situación de riesgo para su salud, puesto que el sobrepeso está estrechamente ligado a enfermedades como la diabetes o afecciones cardiovasculares y respiratorias.
Para luchar contra esta situación y prevenir la obesidad infantil, proponemos una serie de recomendaciones que incluyen: la sensibilización a niños y familias, construir entornos de alimentación sanos y justos, respetar las horas de sueño adecuadas según la edad o promover la reformulación de los productos con ingredientes más sanos.
"Como Defensor Mundial para la Nutrición y el Fin de la Obesidad Infantil de UNICEF y presidente de la Gasol Foundation, me gustaría hacer un llamamiento a la sociedad para que los niños, niñas y adolescentes adquieran buenos hábitos de alimentación, realicen un mínimo de 60 minutos de actividad física al día, duerman el número suficiente de horas según su edad y puedan crecer en un entorno afectivo y seguro que les permita alcanzar su pleno desarrollo”, ha dicho nuestro embajador, Pau Gasol.