LA EDUCACIÓN DE LAS NIÑAS ELEVA LOS ÍNDICES DE ESCOLARIZACIÓN DEL MUNDO

Nunca antes había habido más niños en la escuela que ahora, en parte debido a un aumento en la escolarización de las niñas. Aun así, a pesar de los avances, todavía quedan aproximadamente 100 millones de niños y niñas sin escolarizar. Sin un aumento sustancial, el mundo no alcanzará el objetivo de la enseñanza primaria universal en 2015

Mientras que la diferencia de género en la asistencia a la escuela primaria ha descendido en todo el mundo, es todavía demasiado acusada en muchos lugares del planeta. Las barreras que impiden a las niñas acudir a la escuela en el mundo en desarrollo no solamente les restan oportunidades para el futuro, sino que tienen repercusiones sobre su salud y su supervivencia.

La educación permite salvar vidas, especialmente en lo que se refiere a las niñas:

"Hay más probabilidades de que una niña sin escolarizar contraiga el VIH/SIDA y tenga más dificultades para sacar adelante una familia saludable"

El mundo ha logrado avances impresionantes para lograr que el mismo número de niñas que de niños se matriculen en la escuela primaria. Unos 125 países, entre 180 de los que hay datos disponibles, se encuentran bien encaminados para alcanzar la paridad entre los géneros en 2005.

La paridad en la escuela es una meta establecida por las Naciones Unidas como parte de los Objetivos de Desarrollo del Milenio. Es un requisito para que el mundo logre que la enseñanza primaria sea universal en 2015.

La reducción en la diferencia de género ha contribuido a disminuir el número total de niños y niñas que no reciben una educación primaria. Según las proyecciones, en 2005 habrá menos de 100 millones de niños y niñas que no acudan a la escuela primaria, frente a los 115 millones estimados en 2001. Sin embargo, está claro que todavía hay demasiados niños y niñas que no van a clase, y que, con la tasa actual de aumento de la asistencia a la escuela, no se logrará la meta de conseguir que la enseñanza primaria sea universal en 2015.

Desigualdades entre regiones

El promedio mundial oculta enormes bolsas de desigualdad. Tres regiones –Oriente Medio y África del Norte, Asia meridional, y África occidental y central– no alcanzarán la paridad entre los géneros en la fecha prevista. Ladisparidad entre los géneros favorece a las niñas en dos regiones, América Latina y el Caribe y Asia oriental y el Pacífico.

Aunque abordar la diferencia de género es fundamental para alcanzar la meta de una educación primaria universal, también es preciso acometer otras barreras que impiden la participación de las niñas y los niños en la escuela. En Haití, por ejemplo, hay más niñas que niños en la escuela primaria, pero más de un 40% de todos los niños y las niñas en edad escolar primaria carecen de acceso a la enseñanza.

Logro de objetivos para 2015

Si se mantiene la tasa actual de progreso, muchos de los países de las regiones de Oriente Medio y África del Norte, Asia oriental y el Pacífico, y América Latina y el Caribe, conseguirán que la enseñanza primaria sea universal en 2015. En el polo opuesto se halla la mayoría de los países de África subsahariana y muchos de Asia meridional, que no se acercarán al objetivo a menos que aceleren en gran medida sus tasas de progreso.

Factores determinantes en la educación de niños y niñas

La pobreza Los niños y las niñas que provienen del 20% de los hogares más pobres del mundo en desarrollo tienen como promedio tres veces menos probabilidades de acudir a la escuela primaria que quienes proceden del 20% más rico. Esta proporción promedio oculta enormes disparidades entre las regiones y entre los países. En la región de ECE/CEI, por ejemplo, los niños más pobres tienen 1,6 más probabilidades de no acudir a la escuela, pero esas probabilidades son cinco veces mayores en Kazajstán y la República de Moldova.

El nivel educativo de las madres Alrededor de un 75% de los niños y niñas que no reciben una enseñanza primaria en los países en desarrollo son hijos de mujeres que no pudieron ellas mismas ir a la escuela. Esta proporción varía enormemente de una región a otra: un 28% en Asia oriental y el Pacífico, frente a un 80% en África occidental y central, Asia meridional, y Oriente Medio y África del Norte.

Otros factores importantes La incidencia del VIH/SIDA, los conflictos civiles, el trabajo infantil, la trata de menores de edad y los desastres naturales, son todos ellos factores que tienen repercusiones claras sobre el acceso a la escuela y que tienden a afectar más a aquellos países donde ya hay una infraestructura educativa muy debilitada.

El esfuerzo de los países afectados y de la comunidad internacional

Todos los países deben comenzar a considerar la educación como un derecho humano fundamental, y no como un lujo que se ofrece allí donde los presupuestos lo permiten. La decisión de Kenya de eliminar los gastos de escolarización de la escuela primaria, siguiendo el ejemplo de Tanzania y Uganda, es una muestra de estos cambios radicales en el ámbito de las ideas.

“El objetivo de alcanzar la enseñanza primaria universal con una igualdad de oportunidades para las niñas y los niños es realista. Es asequible, viable y, más importante aún, es el derecho inalienable de nuestros niños”.

No hay duda de que abrir las puertas de la escuela a todos supone una enorme carga sobre losrecursos de muchos países. Por ello, la asistencia internacional para la educación debe aumentar de manera drástica.

Las Naciones Unidas calculan que se necesitarán 5.600 millones de dólares al año adicionales para lograr la educación primaria universal, una cantidad considerable. Algunos países han reconocido ya a la importancia de este desafío:

  • El Gobierno del Reino Unido ha prometido 2.680 millones de dólares durante los próximos tres años para aumentar la matriculación de las niñas en la escuela.
  • Noruega contribuyó con 51 millones de dólares a las iniciativas para la educación que recibieron apoyo del UNICEF en 2003 y 2004.