UNICEF presenta el 'Atlas sociolingüístico de pueblos indígenas en América Latina'
UNICEF, la Fundación para la Educación en Contextos de Multilingüismo y Pluriculturalidad (FUNPROEIB Andes) y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) presentan el Atlas sociolingüístico de pueblos indígenas en América Latina. El principal objetivo de esta publicación es poner de manifiesto la diversidad étnica, cultural y lingüística de la región.
La publicación contiene información de 21 países y la descripción de 522 pueblos indígenas en América Latina, lo que la convierte en unvalioso instrumento para el diseño e implementación de políticas públicas que tengan en cuenta la riqueza y la complejidad sociolingüística.
Los datos cualitativos y cuantitativos de la publicación orientarán a planificadores gubernamentales y a organizaciones internacionales que trabajen con poblaciones indígenas. De esta manera, se logrará un desarrollo más eficaz de, entre otras, políticas educativas y sanitarias. Además, la publicación será un instrumento central en la planificación para lograr una plena Educación Intercultural y Bilingüe (EIB).
Esta iniciativa se enmarca dentro del Programa Regional sobre Derechos de la Niñez y Adolescencia Indígena en América Latina, desarrollado desde 2006 por UNICEF con el apoyo financiero de la AECID. El objetivo fundamental de este programa es que todos los actores sociales respeten los derechos de la infancia y la adolescencia indígena y los tengan en cuenta en los modelos de desarrollo a nivel regional, subregional, nacional y local.
Convención sobre los Derechos del Niño
En la Convención sobre los Derechos del Niño, que es el instrumento jurídico internacional más ampliamente ratificado, y mandato para UNICEF, se incluye un artículo específico relativo a la EIB, que establece:
"En los Estados en que existan minorías étnicas, religiosas o lingüísticas o personas de origen indígena, no se negará a un niño que pertenezca a tales minorías o que sea indígena el derecho que le corresponde, en común con los demás miembros de su grupo, a tener su propia vida cultural, a profesar y practicar su propia religión, o a emplear su propio idioma…”
La Convención establece, además, una amplia gama de disposiciones que abarcan derechos y libertades civiles, el entorno familiar, la salud básica y el bienestar, la educación, la recreación, las actividades culturales y las medidas especiales necesarias para la protección de todos los niños y niñas sin discriminación.