Vuelta al cole: la violencia, ¿una lección diaria?

Miedo a los insultos, al acoso, a los golpes o las humillaciones. La mitad de los adolescentes del mundo sufre violencia por parte de sus compañeros en las escuelas y sus alrededores.

#STOPViolenciaInfantil

06/09/2018

Así lo demuestra nuestro nuevo informe Una lección diaria: #STOPViolenciaInfantil en las escuelas, que recuerda que la violencia parece inevitable, pero no lo es, se puede prevenir. El estudio indica que el acoso y las peleas físicas están presentes en la educación de 150 millones de niños de entre 13 y 15 años en todo el mundo. Una preocupante realidad que afecta al aprendizaje y al bienestar de los estudiantes, tanto en países pobres como ricos.  

#STOPViolenciaInfantil: una lección inolvidable

"Cada día, muchos estudiantes, ya sea en persona o través de Internet, se enfrentan a una serie de peligros, desde peleas, presión para que formen parte de pandillas o intimidación a formas de disciplina violentas, acoso sexual o violencia armada. Estas situaciones afectan su aprendizaje en el corto plazo, y a la larga pueden provocarles depresión, ansiedad y hasta llevarlos al suicidio, en casos muy extremos. "La violencia es una lección inolvidable que ningún niño debería aprender", lamenta nuestra directora ejecutiva Henrietta H. Fore. Que también recuerda que "la educación es clave para la construcción de sociedades pacíficas" 
 
Nuestro informe muestra, también, las diferentes formas en las que los estudiantes se enfrentan a la violencia en la escuela y en el entorno escolar:

  • Más de 1 de cada 3 estudiantes de entre 13 y 15 años en el mundo se ha sentido acosado, y casi la misma proporción se ha visto envuelta en peleas físicas
  • 3 de cada 10 estudiantes en 39 países industrializados reconocen haber acosado a otros compañeros
  • Cerca de 720 millones de niños en edad escolar viven en países en los que el castigo corporal en la escuela no está completamente prohibido. 
  • Aunque tanto los niños como las niñas corren el mismo riesgo de sufrir acoso escolar, las niñas tienen más probabilidades de ser víctimas de violencia psicológica y los niños y adolescentes están en mayor riesgo de violencia física y amenazas

El informe señala que la violencia derivada del uso de armas, navajas o pistolas en las escuelas se sigue cobrando vidas. Así mismo explica que en un mundo cada vez más digital, los acosadores están difundiendo contenidos violentos, dañinos y humillantes simplemente con un clic. 

#STOPViolenciaInfantil: la situación en España

España es el tercero –entre los 37 países de Europa, EEUU y Canadá que se incluyen en el informe- con menor índice de violencia en las escuelas entre estudiantes de 13 a 15 años. Sin embargo, y según los últimos datos disponibles de 2014 , en nuestro país el 16’7 % de niños entre 13 y 14 años ha manifestado haber sufrido acoso escolar, y 1 de cada 3 (30’4) ha estado involucrado en una pelea en el último año.
 
“La escuela debe ser un lugar seguro para los niños, en el que aprendan y se desarrollen. Sufrir violencia en un entorno escolar es inadmisible y puede marcar de por vida a un niño. En España tenemos ahora una gran oportunidad para sacar adelante la Ley integral para la Erradicación de la Violencia contra la Infancia. Una ley que brinde a los niños la protección necesaria frente a situaciones que no deberían vivir jamás, especialmente en lugares como la escuela, donde los niños deberían saberse siempre seguros”, señala Javier Martos, nuestro director ejecutivo.

#STOPViolenciaInfantil: ¿Qué proponemos?

Desde UNICEF proponemos una serie de medidas urgentes para acabar con la violencia en las escuelas:

  • Implementar las políticas y legislaciones necesarias para proteger a los estudiantes de la violencia en las escuelas. 
  • Reforzar las medidas de prevención y respuesta en las escuelas.
  • Instar a las sociedades y a los individuos a que respalden a los estudiantes a la hora de denunciar actos de violencia, y trabajar para cambiar la cultura dentro de las aulas, y en las sociedades y comunidades.
  • Hacer inversiones específicas y efectivas en soluciones probadas que ayuden a los estudiantes y las escuelas a mantenerse seguros.   
  • Recabar mejor información, desglosada, sobre violencia contra los niños en la escuela y en el entorno escolar, y compartir esos datos.