5 diferencias entre los Objetivos de Desarrollo del Milenio y los Objetivos de Desarrollo Sostenible
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible marcan un cambio de ciclo en la agenda de desarrollo. Descubre por qué.
Cuando en el año 2000 se establecieron los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), muchos pensaron que sus metas eran tan ambiciosas que no podrían alcanzarse. Este año, cuando se vence el plazo para su cumplimiento, los logros conseguidos demuestran que no ha sido así.
Durante los últimos 15 años, 700 millones de personas han salido de la pobreza, se ha salvado la vida de 48 millones de niños menores de 5 años y 5,9 millones de niños han escapado de las garras de la malaria.
En este marco de logros y progresos, llegan los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Agenda 2030, una nueva hoja de ruta que representa una oportunidad para incorporar las lecciones aprendidas en el proceso anterior y llegar a los niños que, por diversos motivos, se han quedado fuera del progreso y el desarrollo.
ODS: ¿Qué ha cambiado?
Pero, ¿qué diferencias hay entre los ODM y los ODS? ¿Ha cambiado solo el nombre o hay algo más? En UNICEF os queremos resumir los 5 cambios más significativos que introducen los ODS en la agenda de desarrollo de los próximos años:
- Sostenibilidad. La nueva hoja de ruta pone en el centro un cuestión que había permanecido en un segundo plano en los últimos 15 años: el modelo actual es insostenible. Si queremos garantizar la vida y los derechos de las personas y el planeta tierra, el modelo a seguir tiene que ser sostenible.
- Equidad. Los ODM se basaban en promedios nacionales y no contaban con la realidad de las comunidades más vulnerables y alejadas. Los ODS incluyen un enfoque en el que se tienen en cuenta más parámetros que reflejan mejor la realidad para poder trabajar con ella.
- Universalidad. Mientras los ODM trabajaban las metas solo en los países en desarrollo, los ODS establecen que no se puede hablar de agenda de desarrollo si no se asume que todos los problemas están interconectados y hay que abordarlos desde todos los países.
- Compromiso. A diferencia de los ODM, los ODS comprometen por primera vez a todos los países del mundo. Esto significa, por ejemplo, que el Gobierno de España tendrá que aplicar la Agenda 2030 en sus políticas internas, lo que supone un cambio sustancial con respecto a los ODS.
- Alcance. Frente a los 8 ODM, ahora tenemos 17 ODS con 169 metas a alcanzar. Aunque pueda parecer ambiciosa, la nueva Agenda no ha querido dejar de lado cuestiones que considera fundamentales como el empleo digno o el cambio climático.
ODS: Un año clave
2015 es un año clave. Este es el año en el que comenzamos a trabajar por el reto de alcanzar el desarrollo para todas las personas y hacerlo de forma sostenible. Los resultados tendrán un impacto directo en todos los gobiernos, ciudades y ámbitos de nuestra vida.
Desde UNICEF, tenemos el compromiso de trabajar para poner a los niños y niñas en el centro de todas las decisiones. Porque los próximos 15 años marcarán su futuro y el de toda la humanidad.