Madres guerreras contra la desnutrición infantil
Cualquier imagen de un niño o niña con desnutrición es dolorosa, remueve nuestras conciencias y nos hace preguntarnos por qué millones de niños siguen muriendo cada año por falta de alimentos y enfermedades infecciosas.
Nos conmueve pensar en el sufrimiento por el que pasan, tan debilitados por los terribles efectos de la desnutrición infantil. Nos preguntamos qué será de ellos y cuáles serán las consecuencias que la desnutrición tendrá sobre su vida.
Sin embargo, muchas veces nos cuesta un poco acordarnos de las personas que más de cerca viven la desnutrición infantil y que, al mismo tiempo, tienen un increíble poder para luchar contra ella: las madres.
CON HERRAMIENTAS ADECUADAS, LAS MUJERES PUEDEN REDUCIR LOS ÍNDICES DE DESNUTRICIÓN
Las mujeres, y más concretamente, las madres, tienen la capacidad de influir directamente en los índices de desnutrición de un país. Pero resulta esencial proporcionarles las herramientas necesarias para conseguirlo.
Para empezar, el propio estado nutricional de una futura madre determinará el de sus hijos. Una mujer que sufre desnutrición tiene más probabilidades de dar a luz un bebé con bajo peso y con futuros problemas de crecimiento. Por lo tanto, un acceso a los alimentos adecuados para las madres influirá positivamente en la supervivencia de sus hijos.
El nivel educativo de las madres y la posición que ocupan en la sociedad también tiene un impacto directo en la alimentación que reciben los niños. Son varios los estudios que relacionan la desnutrición en recién nacidos con la falta de educación de sus madres. A través de sencillas formaciones, las mujeres pueden conocer los beneficios de prácticas como la lactancia materna, que proporciona todos los nutrientes necesarios para los niños y los protege de enfermedades mortales.
Por otra parte, la igualdad de género es esencial para que las mujeres se alimenten de forma adecuada, mejoren su salud y, por lo tanto, la de sus familias. Las madres que tienen un mayor control sobre los ingresos familiares suelen gastar más en la alimentación, salud y bienestar de su familia.
FATIME Y GIOVANNI NOS DEMUESTRAN QUE SE PUEDE ACABAR CON LA DESNUTRICIÓN INFANTIL
Giovanni es un auténtico valiente. Este pequeño de 15 meses ha conseguido superar la desnutrición aguda después de dos semanas de tratamiento intensivo. Ahora empieza a recuperar su sonrisa gracias, entre otras personas, a su madre, Fatime.Esta mujer de República Centroafricana se refugió en casa de su madre con sus seis hijos después de que su marido decidiese echarlos del hogar familiar. Fatime y sus hijos cayeron en una situación de pobreza extrema y Giovanni no tardó en enfermar y perder peso.
Pero Fatime, una verdadera guerrera contra la desnutrición infantil, no se ha separado de su hijo ni un momento, luchando activamente por su supervivencia. "No tengo ni idea de cómo vamos a vivir ahora, pero estoy feliz porque mi bebé está mejor", dice.
TÚ TAMBIÉN PUEDES UNIRTE A LA LUCHA CONTRA LA DESNUTRICIÓN INFANTIL
El trabajo con madres es una de las principales acciones que, desde UNICEF, llevamos a cabo para erradicar la desnutrición infantil. La formación de estas madres tiene efectos claramente positivos en la salud de sus hijos, pero también en la de sus sociedades.
Tú también puedes unirte a millones de madres en guerra contra la desnutrición. Con tu ayuda, podemos contribuir a salvar más vidas. ¡Ahora no podemos parar!
Post escrito por Lara Aparicio, storyteller de UNICEF Comité Español