II Congreso de Ciudades Amigas de la Infancia: alianzas y personas
Post de Marta Arias, directora de Sensibilización y Políticas de Infancia de UNICEF España.
Ha sido un día y medio intenso. Un total de328 personas de todos los
rincones de España (junto con participantes
venidos desde México, Chile y Portugal); 109
municipios representados; una docena de
organizaciones sociales y una preocupación común: cómo
hacer que los municipios sean espacios donde niños y
niñas vean plenamente respetados susderechos. Cómo impulsar, en medio de este contexto
complejo, alianzas de todo tipo para atender en particular lasnecesidades de la infancia más
vulnerable.
Se trataba del II Congreso Internacional del ProgramaCiudades Amigas de la
Infancia, una iniciativa impulsada por UNICEF Comité
Español a la que se han sumado desde sus orígenes aliados de tanto
peso como el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad;
la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y la
Universidad Autónoma de Madrid (a través del Instituto Universitario de
Necesidades y Derechos de la Infancia y la Adolescencia,
IUNDIA).
Es un proyecto del que forman parte ya oficialmente 62
municipios de toda España (los que tienen el sello que les
reconoce formalmente como Ciudades Amigas de la
Infancia), a los que se suman otros muchos más que han
sido reconocidos por sus buenas prácticas, así
como todos aquellos que se están preparando para optar a la
acreditación el próximo año.
En definitiva, un grupo cada vez más amplio de municipios que
han comprendido que apostar por sus ciudadanos más
jóvenes no sólo redunda en el beneficio de los niños, sino
que convierte a las ciudades en un espacio mejor para todos.
Hemos compartido experiencias, preocupaciones y proyectos.
Arrancamos con la inspiración del filósofo y pedagogo José
Antonio Marina, quien nos recordaba, parafraseando el
proverbio africano, que “para respetar y proteger a un niño,
también hace falta la tribu entera”.
En otras palabras, Liliana Ortiz desde México
corroboraba en su experiencia la misma idea: no sólo los gobiernos,
también las familias y la sociedad civil en su conjunto (incluido
el sector privado), deben asumir el reto y la responsabilidad de
proteger los derechos de todos los niños y niñas, implicándose
desde su ámbito de actuación para hacerlos realidad.
Hemos hablado, sobre todo, de personas y
alianzas. Personas que marcan la diferencia, por su
compromiso, su entusiasmo y su capacidad de afrontar cualquier
reto. Cuando estas personas se encuentran en los puestos de máxima
responsabilidad (alcaldes y alcaldesas en este
caso) todo es posible. Pero, por muy comprometidos
que estén, por mucho poder que tengan, ellos solos no
pueden.
LAS ADMINISTRACIONES, EN UNA POSICIÓN DE LIDERAZGO
En una situación como la actual, resulta cada vez más difícil
para los municipios dar respuesta a todas las necesidades que
afrontan sus ciudadanos. Por eso las alianzas son
imprescindibles. Partiendo, eso sí, de los roles y
responsabilidades de cada uno. Y con lasadministraciones en una posición inequívoca deliderazgo, recuperando su capacidad de movilizar a
los vecinos a favor de un objetivo común.
Eso es precisamente lo que desde UNICEF España
queremos plantear con nuestro proyecto ALIA: Alianzas
Locales por la Infancia y la Adolescencia. Con él
pretendemos apoyar a las Ciudades Amigas de la Infancia en su afán
por movilizar a todos los actores del municipio para mejorar la
situación de los niños más vulnerables. Si somos capaces de
mantener el espíritu y el entusiasmo de estos dos días, lo
lograremos seguro.
Toda la información sobre el Congreso, celebrado el 25
y 26 de noviembre en CaixaForum Madrid,
está disponible en www.congresocai.wordpress.com