12-J País Vasco: hacemos un llamamiento a favor del voto por la infancia
UNICEF Comité País Vasco, ante las inminentes elecciones autonómicas, considera que una apuesta política y social por los niños, niñas y adolescentes de Euskadi y del mundo es necesaria y es posible.
08/07/2020
"Niños, niñas y adolescentes en País Vasco son más de 350.000 personas, son sujetos de pleno derecho, conocen lo que ocurre a su alrededor y su aportación es clave para su bienestar y desarrollo”, ha explicado el presidente de UNICEF Comité País Vasco, Isidro Elezgarai, en la presentación del documento 40 propuestas políticas para Euskadi. La infancia y adolescencia en acción, que hemos publicado hoy.
En un contexto global complejo, cambiante y lleno de desafíos, pero también de oportunidades, la Convención sobre los Derechos del Niño (CDN) y la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible proporcionan un excelente marco para dar respuestas a los grandes retos que afectan a Euskadi y, en especial, a los niños y niñas más vulnerables. La protección de los derechos y el bienestar de la infancia y adolescencia, bajo la consigna de no dejar a nadie atrás, ha de ocupar un lugar central de las políticas públicas.
“Los asuntos que afectan a la infancia –desde la pobreza y la desigualdad hasta la educación o la protección frente a la violencia–, representan desafíos fundamentales de nuestra sociedad sobre los que existe un sólido consenso: la necesidad y la urgencia de buscar soluciones”, ha señalado Isidro Elezgarai. “Y como sabemos, los beneficios serán múltiples y repercutirán no sólo en la infancia, sino también, en el conjunto de nuestra sociedad”.
La sociedad que no asuma colectivamente su papel de contribuir en la protección y desarrollo de la infancia tendrá que aceptar futuros costes públicos y privados cada vez más altos. Por ello, desde UNICEF Comité País Vasco se hace un llamamiento a favor del voto por la infancia y adolescencia para las próximas elecciones.
"Confiamos en que a partir del 12 de julio los niños y niñas sean una prioridad en el desarrollo de las políticas públicas tal y como se recoge en el Pacto Vasco por las Familias y la Infancia, contribuyendo al doble objetivo de avanzar en el bienestar de los niños, niñas y adolescentes, y de sus familias, y de progresar hacia un entorno más justo y sostenible para todas personas”, ha añadido la Coordinadora de UNICEF Comité País Vasco, Elsa Fuente.
Por eso, la infancia y la adolescencia debe ser una prioridad en la legislatura 2020-2014:
• Deben existir mecanismos y coordinación institucional que garanticen que se tenga en cuenta el interés superior de la infancia y adolescencia.
• Que se reconozca expresamente como un principio de prioridad presupuestaria a la infancia y adolescencia, garantizando una inversión suficiente, adecuada y estable, incluyendo un mayor peso de las políticas familiares y mejorando la capacidad redistributiva de todo el sistema de beneficios e impuestos por tipo de hogar, lo que permite planificar acciones a medio y largo plazo.
• Garantizar el derecho a una educación inclusiva y de calidad para todos los niños, niñas y adolescentes, rompiendo la brecha digital y la brecha por desigualdad socioeconómica. Avanzar en una Ley Vasca de Educación que lo garantice, así como en el apoyo educativo que cubra costos indirectos de la educación obligatoria. Porque la inversión de recursos tiene un impacto positivo en la calidad y la equidad del sistema.
• Políticas públicas efectivas contra la pobreza infantil, que requieren una mayor inversión en la protección social de la familia y de la infancia. Tener en cuenta el enfoque de derechos de infancia en la renta de garantía de ingresos y en las ayudas de emergencia, entre otras. Porque no hacerlo significa crecer con menos oportunidades educativas, peor salud y, en un contexto de desigualdad económica, crecer con menos oportunidades de movilidad social. La pandemia de la COVID-19 solo ha acentuado estas desigualdades y está poniendo a muchas familias con niños y niñas en una situación muy compleja.
• Y desde un enfoque preventivo y de derechos, poner en marcha una estrategia integral en la CAPV que promueva entornos seguros, desarrollando programas específicos contra las diversas formas de violencia que sufren los niños, niñas y adolescentes, incluida la violencia de género, garantizando protocolos claros y proporcionando recursos suficientes para poner fin a cualquier tipo de violencia contra la infancia.
Se debe asegurar la continuidad de los esfuerzos realizados para desarrollar planes de acción y estrategias para la implementación de la Agenda 2030 en la promoción de políticas públicas, en la cooperación internacional, y en la inversión suficiente para los niños, niñas y adolescentes, llegando a los más vulnerables y garantizando no dejar a nadie atrás.
"La cooperación descentralizada para el desarrollo de la CAPV lleva más de 30 años transformando las vidas de muchas personas y comunidades en territorios y países empobrecidos, y desde UNICEF Comité País Vasco creemos en la necesidad de reafirmar el compromiso con políticas de desarrollo ambiciosas, estableciendo un aumento sostenido de los fondos de Ayuda Oficial al Desarrollo con una apuesta clara de coherencia de políticas, porque el desafío no es solo presupuestario, sino también estratégico y político. Y supone una oportunidad para millones de niños, niñas y adolescentes”, ha señalado Isidro Elezgarai.
En resumen, UNICEF Comité País Vasco ha propuesto poner el cuidado de la vida en el centro, con medidas específicamente dirigidas a proteger y garantizar los derechos de quienes son más vulnerables.