Propósitos 2018 para los derechos de la infancia en España
Acabamos de estrenar 2018 y en UNICEF ya tenemos nuestra lista de buenos propósitos que, entre todos, tenemos que cumplir este año. Se lo debemos a todos los niños y niñas en nuestro país.
Comienza un nuevo año y toca planificar los avances más urgentes que, entre todos, tenemos que conseguir para la infancia de nuestro país. Especialmente en un año en el que el Comité de Derechos del Niño elaborará un informe que evaluará el cumplimiento de la Convención sobre los Derechos del Niño en España y que guiará las políticas públicas de infancia en los próximos años.
Como todas las listas de buenos propósitos, la nuestra empieza echando la vista atrás para hacer balance de lo que ha supuesto 2017. Un año en el que, a pesar de los retos, también se han conseguido algunos avances para los niños españoles.
Los niños en el Congreso: una actividad permanente
Una de las mejores noticias del año es que, por primera vez, los niños han podido comparecer en el Congreso de los Diputados donde han sido escuchados y han podido ejercer su derecho a participar. Ahora, para 2018, todos los actores implicados deberíamos conseguir que esta participación infantil sea permanente, de forma que todas las leyes que les afectan tengan en cuenta su opinión de manera sistemática.
Pobreza infantil: alcanzar la media europea en inversión social
En 2017 también se aprobaron medidas específicas de lucha contra la pobreza infantil. En los últimos Presupuestos Generales del Estado se incrementaron en 10,7 millones de euros las partidas de protección social orientadas a la pobreza infantil y se destinó una partida específica para las familias refugiadas con niños. En este sentido todavía queda mucho por hacer. En 2018 deberíamos lograr un incremento de la inversión en protección social para la infancia y colocarnos a la altura de la media de los países europeos. Además, debemos garantizar los derechos de todos los niños, en especial de aquellos en situación de mayor vulnerabilidad.
Violencia contra los niños: una ley integral y específica
Otro gran hito del 2017 ha sido el Pacto de Estado contra la Violencia de Género, en el que se ha reconocido a los niños como víctimas de la violencia de género. Sin embargo, en 2018 deberíamos ir más allá y conseguir que se firme una ley integral y específica de violencia contra la infancia. Porque la violencia contra los niños y niñas en nuestro país existe y es algo que no podemos tolerar ni un minuto más.
Protección de los más vulnerables: una realidad inmediata
A lo largo de 2017, en UNICEF España trabajamos para proteger a los más vulnerables como los menores no acompañados, los niños y niñas víctimas de trata y los niños en acogimiento residencial, creando guías y políticas para que sean tratados con iguales derechos que cualquier otro niño y niña de nuestro país. Nuestro deseo para 2018 es que estas políticas sean una realidad inmediata.
Derecho a la educación de calidad e inclusiva
Si bien se han hecho esfuerzos en políticas para mejorar el grave problema de abandono y fracaso escolar, seguimos en una tasa del 19% y 22% respectivamente. Este sigue siendo un gran reto en nuestro país que pasa por buscar una educación inclusiva y de calidad para la infancia en España. En 2017 publicamos nuestro informe sobre exclusión educativa, que refuerza la idea de lograr un consenso educativo que garantice una educación inclusiva y de calidad para todos los niños y en 2018 no cesaremos en nuestro empeño de lograrlo.
Una agenda política para los niños de todo el mundo
En los últimos meses, en UNICEF España hemos logrado, junto a otras organizaciones, que se cree un organismo de coordinación supraministerial para la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, así como indicadores y objetivos para lograrlo. Además, hemos liderado que la infancia esté en el centro de la nueva Ley de Cooperación. Sin embargo, seguimos echando de menos la adopción de medidas concretas, una tarea que entre todos debemos acometer en 2018.
No son muchos, pero son muy importantes. De estos propósitos depende que sigamos consiguiendo avances para los niños y niñas de nuestro país. Se lo debemos.