Qué hace UNICEF contra el coronavirus en el mundo
Gracias a la increíble respuesta de nuestros socios, donantes y aliados, hemos llegado a más de 800 millones de personas con mensajes sobre el Covid-19, alcanzado a 29 millones de niños con educación a distancia o enviado 1,2 millones de mascarillas.
27/04/2020
En Níger, Senegal, Jordania o Yemen, distribuimos jabón, desinfectante y lavamanos (bidones con grifo y soporte para lavarse las manos) para luchar contra el coronavirus. También guantes, mascarillas, equipos de protección individual (EPI) y otros materiales de protección para el personal de salud, al igual que en España, Ecuador o Burkina Faso.
En Siria, pese a las restricciones de movimiento, seguimos llevando agua a niños, niñas y familias desplazados por el conflicto, pintando los camiones cisterna con mensajes de prevención del Covid-19 para sustituir las sesiones de formación que no podemos realizar.
En Mauritania, reforzamos las líneas telefónicas de atención ante casos de violencia contra niñas, niños y mujeres, y utilizamos la radio para difundir mensajes e información sobre el coronavirus, y para transmitir contenidos educativos ahora que las escuelas han cerrado.
En Liberia, aprovechando los aprendizajes del ébola, hemos movilizado redes de jóvenes para difundir medidas de prevención y referir los posibles casos, y hemos instalado, próximos a los hospitales, centros de acogida para niños y niñas cuyos padres estén ingresados con Covid-19.
Son solo algunos ejemplos de cómo, en todo el mundo, desde UNICEF trabajamos para contener la propagación de la enfermedad, y además para evitar los efectos “colaterales” de la pandemia sobre niños y niñas, en especial los más vulnerables.
Gracias a la increíble respuesta y solidaridad de nuestros socios, donantes y aliados, hemos llegado a más de 800 millones de personas con mensajes sobre el Covid-19, alcanzado a 29 millones de niños con programas de educación a distancia, o enviado más de 6,4 millones de guantes o 1,2 millones de mascarillas.
Y seguimos trabajando día a día para asegurar que los niños y niñas en condiciones más precarias tengan un lugar donde refugiarse, reciban vacunas y atención médica también frente a otras enfermedades, estén protegidos ante abusos o violencia, y reciban alimentos y educación, incluso si sus padres pierden su trabajo y sus ingresos. Trabajamos para que los centros de salud tengan agua, electricidad y equipos de protección para su personal, y para que la educación y las oportunidades lleguen a todos.
Coronavirus: una respuesta global y solidaria
Esta pandemia nos ha golpeado a todos, recordándonos lo frágiles e interdependientes que somos, y como solo una respuesta global y solidaria puede protegernos y hacernos más fuertes.
Nos recuerda también lo importante de seguir trabajando por los niños y las niñas que viven en condiciones más duras, porque solo protegiéndolos a ellos, estamos protegiéndonos nosotros y el mundo en que vivimos.
Pese a los enormes retos, podemos sentirnos orgullosos de que el trabajo de UNICEF a lo largo de los años haya permitido que más niños y niñas tengan agua y jabón para lavarse las manos; vacunas y atención médica que los protejan de esta y otras enfermedades; que haya menos niños desnutridos y, por lo tanto, especialmente débiles ante el Covid-19; que existan mecanismos de protección para prevenir abusos o violencia contra niñas y niños, y atenderles en caso necesario, incluso en situaciones de confinamiento. Todo esto, que solo es posible gracias a todos los socios, donantes y aliados que confían y se comprometen con UNICEF, ha hecho que ellos y sus familias sean un poco más fuertes, más resilientes, ante la amenaza del coronavirus.
Ahora que la propagación del coronavirus aumenta en los países más pobres, seguimos juntos llevando agua, suministros, información, educación y protección. Llevando apoyo y esperanza a quienes más lo necesitan. #JuntosContraElCovid