Siria: invertir en educación para proteger a una generación de niños
En el último año, 770.000 niños afectados por la crisis de Siria han continuado sus estudios a través de diferentes formatos y casi 660.000 niños han recibido apoyo psicológico.
“Ayudar a los niños de Siria es invertir en el futuro del país, ya que los niños de hoy serán los médicos, profesores, abogados y líderes del mañana. Apostar por esta generación consiste en ayudarles a adquirir las capacidades y el conocimiento que necesitarán para reconstruir sus comunidades cuando regrese la paz”, explica el director ejecutivo de UNICEF, Anthony Lake. “Tenemos que curar sus corazones y sus mentes. Y hay mucho más por hacer”.
La crisis de Siria está poniendo en riesgo a una generación entera de niños, según advierte un informe de evaluación publicado ayer por la iniciativa No Lost Generation (No a una generación perdida) en un encuentro entre gobiernos, ONG y aliados de las Naciones Unidas, que se ha mantenido paralelamente a la Asamblea General de la ONU.
El encuentro en la sede de UNICEF coincide con el aniversario del llamamiento que hicieron estos aliados hace un año, en el marco de la Asamblea General de la ONU, para evitar la pérdida de una generación entera de niños sirios. Desde entonces, se han logrado importantes avances en llevar apoyo educativo y de protección a más niños, a pesar de los constantes enfrentamientos, el aumento de los desplazados y el empeoramiento de las condiciones de vida de muchas familias.
Siria: avances en educación y protección
- En los países vecinos que acogen refugiados sirios, la matriculación en educación formal y no formal aumentó desde los 169.500 alumnos en 2013 a los 489.000 en 2014.
- 128.000 alumnos han recibido apoyo para asistir al colegio en zonas de guerra en Siria.
- En 2014, 72.000 niños dentro de Siria y 587.000 niños refugiados que viven en países de acogida han recibido apoyo psicosocial.
- 200.000 cuidadores en Líbano han recibido programas de apoyo diseñados para promover un entorno educativo y prevenir el maltrato infantil.
El informe señala que los adolescentes son particularmente vulnerables, ya que acumulan rabia y frustración por su situación, lo que les hace más susceptibles de adherirse a grupos armados. Es fundamental generar oportunidades para evitar que caigan en la violencia y el conflicto.
La iniciativa No Lost Generation hizo un llamamiento de 689 millones de euros en 2014 para servicios de educación y protección en Siria y los países de acogida. A día de hoy, se han recaudado 234 millones de euros, lo que supone una brecha de 455 millones hasta alcanzar el objetivo marcado.