Sudán del Sur: 1 de cada 3 niños está desnutrido en las áreas más golpeadas por la violencia
Los niños de Sudán del Sur se enfrentan a un empeoramiento de la crisis nutricional al intensificarse los combates.
Casi 250.000 niños están en un riesgo considerable debido a que la seguridad alimentaria y nutricional se está deteriorando rápidamente en algunas partes del país.
Si estos niños no reciben tratamiento, tienen 9 veces más posibilidades de morir que un niño sano.
Esta crisis es el resultado del actual conflicto en Sudán del Sur, la disminución de las reservas de alimentos en los hogares y una economía en recesión.
Sudán del Sur: 874.000 menores de 5 años se enfrentan a la inseguridad alimentaria
El número de personas que afrontan una inseguridad alimentaria grave casi se ha duplicado desde el comienzo del año, de 2,5 millones de personas a unas 4,6 millones, incluyendo a aproximadamente 874.000 niños menores de 5 años, según las últimas predicciones del grupo técnico de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases (IPC, por sus siglas en inglés), del que UNICEF es miembro. Este es el mayor número de familias en crisis o niveles de emergencia de inseguridad alimentaria desde el inicio del conflicto en diciembre de 2013.
Desde UNICEF advertimos que los niños atrapados por el conflicto sin acceso a servicios médicos básicos ni alimentos tendrán que luchar por sobrevivir a este periodo de escasez sin una reanudación urgente de la asistencia humanitaria en las áreas afectadas por el conflicto.
“A pesar de todos los progresos realizados el año pasado con nuestros aliados para tratar la desnutrición de más niños que nunca, las vidas de las mujeres y niños vulnerables, que han agotado todos los mecanismos a su alcance para hacer frente a la situación, están en peligro”, explica el representante de UNICEF en Sudán del Sur, Jonathan Veitch.
Sudán del Sur: los niños sin tratamiento tienen 9 veces más posibilidades de morir
Además de esta situación ya extrema, los intensos combates en el Gran Alto Nilo han forzado, solo en el mes de mayo, al menos a 100.000 personas a huir de sus casas, abandonando sus existencias fundamentales de reservas de alimentos, ganado y cultivos. Algunos aliados de UNICEF en nutrición se han visto obligados a retirar sus servicios y los suministros nutricionales han sido saqueados.
“Si no se da acceso humanitario para proporcionar servicios vitales a los niños y no se siguen preparando suministros antes de que las carreteras sean impracticables debido a la temporada de lluvias, la ya frágil situación se convertirá en catastrófica”, explica Veitch.
Desde UNICEF hemos tratado a casi 50.000 niños contra la desnutrición aguda grave en lo que va de año, a través del programa nacional de fomento de la nutrición y las Misiones de Respuesta Rápida en las áreas remotas afectadas por el conflicto.