15.000 niños hondureños esperan su deportación en centros de detención de Estados Unidos

Hablamos con Héctor Espinal, especialista en comunicación de UNICEF en Honduras, para aprender más acerca de cómo UNICEF está abordando las causas profundas de la migración infantil. 

 

 

ESPINAL: En todo el país hay una tasa de mortalidad infantil de 23 por 1.000. Tenemos 900 mil niños y adolescentes que no trabajan ni van a la escuela. Tenemos 12 niños que son asesinados cada día víctimas de la violencia armada. Sólo el 36% de los adolescentes llegan a la educación secundaria. 

 

 

ESPINAL: En Estados Unidos hay 47.000 niños de América Central (de El Salvador, Honduras y Guatemala) que están detenidos o en proceso de ser deportados. De estos 47.000, 13.000 son de Honduras. 

 

 

ESPINAL: Entre octubre de 2013 y junio de 2014, casi 15.000 niños hondureños cruzaron la frontera con Estados Unidos. Ahora se encuentran en centros de detención o sometidos a un proceso de deportación. De esta cifra, sólo 56 han sido deportados a Honduras hasta la fecha. La información que tenemos es que todos ellos serán deportados; más de 14.000 niños serán deportados a Honduras en los próximos meses. 

 

 

ESPINAL: La primera cosa que necesitan estas familias son las oportunidades de trabajo para satisfacer sus demandas básicas; si no, los niños van a querer tratar de volver a entrar en Estados Unidos. También necesitan protección porque, en ocasiones, hacen el viaje a Estados Unidos cuando son reclutados o amenazados por las maras. Así que cuando estos niños regresan, la familia los está esperando, pero puede que algún miembro de la mara también los esté esperando. 

 

 

ESPINAL: Hay tres cosas que se pueden hacer para estos niños. La primera de ellas es apoyar a las familias con un paquete básico que cubra las necesidades inmediatas, incluyendo un trabajo. La segunda es aceptar a todos estos niños en la escuela, independientemente de sus condiciones. Y la tercera es asegurar que los niños que han sido amenazados principalmente por las pandillas son reubicados en otra comunidad donde su vida no está en peligro. 

 

 

ESPINAL: UNICEF aboga por trabajar con el gobierno para abordar las causas fundamentales de la pobreza; para asegurar que los niños tengan un ambiente protegido, especialmente contra la delincuencia organizada y los traficantes de drogas; y para asegurar que los niños sean devueltos a sus familias. 

Cada vez que la respuesta ha sido sistemática, se ha logrado revertir la violencia, y las causas de la migración. El gobierno escucha a UNICEF y que su credibilidad y su capacidad de cambiar las cosas es aún más importante en el ámbito local. 

 

Puedes conocer más sobre el trabajo de UNICEF en materia de protección infantil.