Declaración de Nueva York: un primer paso para afrontar la crisis mundial de migrantes y refugiados
En UNICEF valoramos positivamente la Declaración de Nueva York que salió de la primera cumbre sobre migrantes y refugiados celebrada esta semana en la Asamblea General de Naciones Unidas.
Es un primer paso, ya que la Declaración propone una respuesta más integral, previsible y sostenible al desplazamiento forzado, así como un sistema de gobernanza para la migración internacional.
Y en relación a la infancia, el énfasis que pone en que los Estados Miembros cumplan con sus obligaciones en relación a la Convención sobre los Derechos del Niño (CDN), resulta crucial para garantizar los derechos de los niños en tránsito.
La Declaración manifiesta los graves riesgos a los que se enfrentan los niños migrantes y refugiados, especialmente quienes se desplazan solos, y la necesidad de darles una protección especializada. Esto incluye, entre otras medidas, el compromiso de garantizar que pueden volver al colegio cuando llegan a sus países de destino, y medidas para mantener a las familias unidas y combatir la xenofobia.
No obstante, aunque la Declaración establece que se trabaje para poner fin a la detención de los niños sobre la base de su situación en materia de migración, no ha condenado con la firmeza necesaria esta práctica.
Durante los dos próximos años, en UNICEF trabajaremos con los Estados Miembros, aliados de Naciones Unidas, la sociedad civil y la infancia, para definir acciones concretas que protejan a todos los niños desarraigados de sus hogares.
Ayuda Refugiados: Nuestras propuestas para proteger a los niños
Mientras, insistimos en nuestro llamamiento a la comunidad internacional para que se centre en 6 medidas específicas que apoyen a los niños desplazados, refugiados y migrantes:
- Proteger a los niños refugiados y migrantes de la explotación y la violencia, especialmente a los niños no acompañados.
- Acabar con la detención de niños que buscan refugio o migran, introduciendo una serie de alternativas prácticas.
- Mantener la unión familiar como la mejor manera de proteger a los niños y darles un estatus legal.
- Mantener el acceso de los niños refugiados y migrantes a la educación y los servicios de salud.
- Incidir sobre las causas subyacentes de los movimientos a gran escala de personas refugiadas y migrantes.
- Promover medidas para combatir la xenofobia, la discriminación y la marginalización.
Compromiso para acoger a 360.000 refugiados en 2016
Nueva York ha acogido esta semana una Reunión Plenaria de Alto Nivel de la Asamblea General de Naciones Unidas sobre los Desplazamientos a gran escala de Migrantes y Refugiados, y una Cumbre de Líderes sobre la Crisis Global de Refugiados convocada por el presidente estadounidense Barack Obama.
En esta última, el mandatario consiguió el compromiso de medio centenar de países para acoger a 360.000 refugiados este año, casi el doble que en 2015.
“Enfrentamos una crisis de proporciones épicas”, afirmó. “No podemos desviar la mirada o dar la espalda. Cerrar la puerta en la cara de esas familias sería traicionar nuestros valores más profundos”, advirtió Obama.