Palestina e Israel: cada minuto cuenta para los niños
Más de un millón de niños y niñas están sufriendo la catastrófica situación que está atravesando Oriente. Desde UNICEF trabajamos contrarreloj para cubrir las necesidades inmediatas e inmensas de las familias afectadas.
16/02/2024
El impacto que el conflicto en curso está teniendo en niños y familias no tiene precedentes. Desde el 7 de octubre, se han denunciado graves violaciones a gran escala contra los niños en Israel y en el Estado de Palestina, como homicidios y mutilaciones de niños, secuestros y ataques contra infraestructuras civiles y servicios públicos esenciales, como escuelas, instalaciones de agua, saneamiento e higiene y centros de salud, incluidas ambulancias y hospitales.
La rápida escalada del conflicto en el Estado de Palestina e Israel ha provocado importantes pérdidas de vidas humanas. Cada día mueren o resultan heridos más de 400 niños en la Franja de Gaza; desde el comienzo de las hostilidades han muerto al menos 25.700 palestinos, de los cuales hasta el 70% eran mujeres y niños. Además, más de 63.740 palestinos resultaron heridos, entre ellos al menos 10.787 niños y miles de ellos siguen desaparecidos y es probable que estén heridos o muertos bajo los escombros de los edificios destruidos. Las labores de rescate se ven obstaculizadas por los continuos ataques aéreos, la escasez de combustible para vehículos y equipos, y las limitadas capacidades de comunicación. Otros 98 niños habrían muerto en Cisjordania también como consecuencia del aumento de la violencia.
Según fuentes israelíes, han muerto al menos 1.200 israelíes y extranjeros, la mayoría en los ataques del 7 de octubre, y más de 7.500 han resultado heridos. Se ha informado de la muerte de al menos 35 niños. Unos 250 israelíes, entre ellos más de 36 niños, fueron secuestrados en la Franja de Gaza, de los cuales 34 han sido liberados hasta el 27 de diciembre, y se dispone de muy poca información sobre los niños que permanecen cautivos.
¿Qué está pasando en Gaza?
Todos los niños menores de cinco años de la Franja de Gaza -335.000- corren un alto riesgo de desnutrición grave y muerte evitable. El Secretario General de la ONU ya ha advertido del alto riesgo de hambruna.
La población de la Franja de Gaza sólo tiene acceso a entre 1 y 3 litros de agua al día, lo que hace temer deshidratación, insuficiencia renal y otras consecuencias críticas para la salud pública.
Las mujeres, especialmente las embarazadas o lactantes, junto con los niños, se enfrentan a mayores riesgos debido a la falta de agua y saneamiento adecuados. Los menores de cinco años son más susceptibles de contraer enfermedades transmitidas por el agua debido a la contaminación de esta y a una higiene inadecuada.
Una catástrofe de salud pública
La OMS ha informado de que en toda la Franja de Gaza sólo 8 de los 36 hospitales siguen funcionando parcialmente, y sólo 18 de los 72 centros de atención primaria siguen operativos. Las lluvias han seguido provocando inundaciones en toda la Franja de Gaza. Con una amplia prevalencia de la defecación al aire libre, existe un alto riesgo de brotes de enfermedades, incluida la diarrea acuosa.
El funcionamiento de los centros sanitarios y las ambulancias se ve gravemente afectado por la grave escasez de combustible, así como por el agotamiento de medicamentos y suministros médicos. Las graves deficiencias en el acceso a los servicios de salud siguen afectando especialmente a las mujeres y las niñas, sobre todo en lo que respecta a la atención materna y neonatal, así como a la salud reproductiva.
Con el aumento de la inseguridad alimentaria, las mujeres y los niños, especialmente las mujeres embarazadas y lactantes, corren el riesgo de sufrir desnutrición o malnutrición. Los casos de diarrea infantil han aumentado un 50% en solo una semana, y el 90% de los niños menores de dos años se encuentran ahora en situación de "pobreza alimentaria grave". Hay 130 bebés prematuros que dependen de incubadoras y necesitan electricidad para mantenerse con vida, de los cuales el 61% están en el Norte.
Hay 625.000 niños en la Franja de Gaza que siguen sin recibir educación. Hasta el 6 de noviembre, al menos 278 escuelas habían sufrido daños, lo que representa casi el 60% de todos los edificios escolares de la Franja de Gaza (una escuela totalmente dañada, 66 con daños graves, 137 con daños moderados y 71 escuelas con daños menores).
La mayoría de los niños han sido desplazados, han sido testigos de momentos traumáticos y no tienen zonas seguras para jugar. Los niños con discapacidades son más vulnerables, ya que muchos tienen necesidades especializadas, como dispositivos de asistencia.
En todas las guerras, son los niños los que sufren primero y los que más acaban sufriendo, por eso, desde UNICEF hacemos un doble llamamiento. Pedimos un alto el fuego inmediato y que se mantenga el acceso humanitario para poder prestar a los afectados la asistencia que tanto necesitan y pedimos también que se libere a todos los rehenes.
¿Y qué hace UNICEF en Gaza?
En respuesta a las necesidades urgentes de agua, saneamiento e higiene, hemos distribuido más de 670.000 litros de agua embotellada en refugios de emergencia y hospitales. Y, para restablecer las operaciones de los sistemas de abastecimiento de agua y garantizar la prestación de servicios, estamos apoyando el suministro de una planta móvil de tratamiento de agua (5m3/hora) al Centro de Formación de Khan Younis que alberga a más de 25.000 personas; una bomba de agua; y combustible para las dos plantas desalinizadoras operativas y los pozos de agua críticos.
Además, también hemos apoyado el transporte de agua en camiones a los refugios, atendiendo a un millón de personas en las zonas de Deir Al Balah, Khan Younis y Rafah, incluidos más de 1.326.000 niños, con todas las intervenciones relacionadas con el agua.
Las condiciones ambientales y sanitarias se están deteriorando rápidamente en los refugios superpoblados, lo que aumenta los riesgos para la salud pública de los niños y sus familias. Por eso, por un lado, hemos distribuido kits de higiene, incluidos suministros de salud e higiene menstrual y pastillas potabilizadoras de agua; y, por otro, hemos aumentando nuestro apoyo al sistema sanitario, mediante la provisión de suministros médicos, incluyendo medicinas y consumibles. Hasta la fecha, un total de 194.000 personas, incluidas mujeres, adolescentes y recién nacidos, han recibido suministros vitales.
Hemos proporcionado suplementos a 105.800 madres lactantes que luchan por alimentarse a sí mismas y a sus bebés, también tratamiento contra la anemia para más de 33.300 mujeres embarazadas y lactantes, galletas de alta energía para 23.000 niños de 6 a 23 meses en la Franja de Gaza y suplementos de micronutrientes para 16.000 niños de 24 a 59 meses.
En cuanto a protección, en la Franja de Gaza, más de 2.936 personas, incluidos 2.672 niños, recibieron apoyo psicosocial a través de nuestra línea de ayuda. Además, 77 niños y sus cuidadores recibieron sesiones educativas sobre los restos explosivos de guerra en dos refugios.
También estamos acelerando la puesta en marcha de la identificación, documentación, rastreo y reunificación para niños no acompañados y separados.
También entregamos ayuda humanitaria por el paso de Rafah
Desde el 21 de octubre, un total de 386 camiones de UNICEF han cruzado la Franja de Gaza desde Egipto con suministros críticos de emergencia como jabón, botellas de agua, lonas, mantas, pastillas potabilizadoras y tanques de almacenamiento de agua. También tenemos otros 247 camiones preparados para atravesar la frontera en distintas fases de tramitación.
Necesidades inmediatas e inmensas
Estas entrada de ayuda humanitaria están salvando vidas, pero las necesidades son inmediatas e inmensas, no solo de agua, sino de alimentos, combustible, medicamentos y bienes y servicios esenciales. A menos que podamos proporcionar suministros humanitarios de forma constante, nos enfrentamos a la amenaza real de brotes de enfermedades potencialmente mortales.
Pedimos que nos permitan llevar todos los suministros humanitarios que tenemos preparados de forma segura a los niños y las familias necesitadas dondequiera que se encuentren, de conformidad con las normas de la guerra.
Además, pedimos:
- Que se abran todos los cruces de acceso a Gaza para la circulación de suministros y trabajadores humanitarios.
- Que se permita la salida de los casos médicos urgentes en Gaza o que puedan recibir servicios sanitarios críticos.
- Acceso seguro y sostenido al agua, los alimentos, la sanidad y el combustible, necesarios para permitir esos servicios esenciales.
- El respeto y la protección de las infraestructuras civiles, como refugios, instalaciones sanitarias, eléctricas, de agua y saneamiento.
- La protección de la misión médica para prevenir brotes de enfermedades y prestar asistencia a los enfermos y heridos.
Llamamiento urgente para ayudar a los niños y niñas de la crisis de Gaza.
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