El frío y la falta de refugio, mortales para la infancia en Gaza
La pesadilla continúa después de más de 14 meses al límite. No pueden más. Los suministros de invierno que les estamos distribuyendo son fundamentales para su supervivencia.
10/01/2025
El año comienza en Gaza con unas amenazas para los niños y niñas que no parecen tener fin: ahora el frío y la falta de refugio están siendo mortales para unas familias que no pueden más, después de más de 14 meses al límite.
Según el Ministerio de Salud palestino, han fallecido recién nacidos y bebés a causa de la hipotermia. Estas muertes, que podrían haberse evitado, evidencian las condiciones desesperadas y el deterioro que enfrentan las familias y los niños en Gaza.
El 2024 ha sido un año de sufrimiento inimaginable para las familias. Además de enfrentarse a la constante amenaza de los ataques, muchas no tienen refugios adecuados para vivir, alimentos suficientes ni acceso a atención médica. Los niños pequeños que viven en tiendas de campaña o refugios improvisados incapaces de protegerlos del frío están en riesgo de sufrir congelación. Para los recién nacidos, bebés y niños y niñas con problemas de salud, el riesgo es todavía mayor.
Un frío que congela y amenaza a la infancia
En estas condiciones, el invierno ha llegado a Gaza. Los niños y niñas tienen frío, están mojados y descalzos. Muchos todavía llevan ropa de verano. Sin gas para cocinar, muchos buscan entre los escombros restos de plástico para quemar.
Las enfermedades hacen estragos en sus cuerpecitos, mientras los hospitales están desabastecidos y son atacados continuamente. La atención sanitaria está al límite: los hospitales carecen de medicinas, material sanitario y médicos. Esta situación se ve agravada por apagones eléctricos, que hace que los hospitales y otras infraestructuras críticas dependan totalmente de las escasas importaciones de combustible.
Se espera que las temperaturas sigan bajando en los próximos días y, trágicamente, es previsible que más niños pierdan la vida debido a las condiciones inhumanas que soportan, sin protección alguna contra el frío.
“Los niños y niñas de Gaza tienen frío, están enfermos y traumatizados. El hambre, la desnutrición y las terribles condiciones de vida en general, siguen poniendo en peligro sus vidas. Más del 96% de las mujeres y niños de Gaza no pueden cubrir sus necesidades nutricionales básicas. La mayoría sobrevive a base de harina, lentejas, pasta y alimentos enlatados racionados, una dieta que compromete lentamente su salud", explica Rosalia Bollen, portavoz de UNICEF.
UNICEF: mantas y ropa de invierno marcan la diferencia
Saad, de cinco años, perdió la vista durante un bombardeo que le ocasionó lesiones en la cabeza y quemaduras. A finales de diciembre, él y su familia recibieron los suministros de invierno que UNICEF está distribuyendo en Gaza para ayudar a hacer frente a las bajas temperaturas. © UNICEF
Aunque las necesidades son enormes, los equipos de UNICEF siguen trabajando incansablemente, distribuyendo ropa de invierno, mantas y suministros de emergencia para los niños y niñas.
Familias como la de Saad, de 5 años, que vive en Deir Al Balah, en el centro de Gaza, ya recibieron nuestros suministros. A finales de diciembre distribuimos ropa de abrigo a niños y niñas con discapacidad. Saad perdió la vista por culpa de un bombardeo que le dejó lesiones en la cabeza y varias quemaduras. Cuando recibieron su caja con los suministros de invierno, mientras su hermana mayor la abría, Saad con impaciencia tocaba la ropa para sentir los materiales de su nueva chaqueta acolchada, su gorro de invierno con un pompón esponjoso, sus calcetines abrigados y un par de zapatos resistentes.
Además de la distribución de ropa de abrigo y mantas, desde UNICEF estamos mejorando las condiciones de los refugios para protegerlos contra el frío y las inundaciones, distribuyendo equipos de calefacción, facilitando el acceso a fuentes de combustible apropiadas para una calefacción interior segura y estableciendo espacios seguros para que los niños y niñas aprendan y jueguen en casas acondicionadas para el invierno. tiendas de campaña y caravanas temporales.
Otro aspecto clave de la respuesta de UNICEF son las transferencias de dinero en efectivo, que permiten a las familias de Gaza comprar alimentos, ropa, medicinas y otros artículos de primera necesidad cuando los productos están disponibles en el mercado.
Sin embargo, la capacidad de las organizaciones humanitarias para entregar ayuda a la escala requerida está muy restringida. En noviembre entraron en Gaza una media de 65 camiones con ayuda al día, una cifra muy insuficiente para cubrir las necesidades urgentes de los niños, las mujeres y el resto de la población. Para hacernos una idea, antes del conflicto, entraban unos 500 camiones.
Es crucial garantizar el acceso humanitario seguro y sin restricciones tanto hacia la Franja de Gaza como dentro de ella, para poder proporcionar ayuda a las poblaciones afectadas, sin importar dónde se encuentren.
"Los niños tienen derecho a un futuro libre de miedo y lleno de esperanza, y esto debe comenzar con un alto el fuego inmediato y duradero en Gaza, la liberación de todos los rehenes y un compromiso renovado para trabajar juntos en atender las necesidades urgentes de los niños, niñas y sus familias”, afirma el director de UNICEF para Oriente Medio y el Norte de África, Edouard Beigbeder.